Estupenda jornada hoy con toda la familia en un Santiago de Compostela espectacular. Con sol, nubarrones, frío, calor --de gente y de sol-- y mucha vida alrededor de la majestuosa Plaza del Obradoiro. Subimos y paseamos con los niños por los tejados de la Catedral y volvimos a maravillarnos con la magia del veloz botafumeiro. Esto es una pequeña parte de lo que ví a golpe de iPhone, que a veces sorprende por su calidad como cámara de fotos siempre a mano:
Las torres de la Catedral de Santiago desde los propios tejados
El Apóstol a contraluz, también desde la cubierta de la Catedral
El botafumeiro en plena acción
El incensario volando en su punto más alto