El patrón es fácil de identificar en el mundo de los deportes, aunque también lo podemos aplicar en el dominio profesional, familiar o personal. Lo vemos cuando un deportista o un equipo se encuentra en racha y encadena sucesivas victorias consecutivas.
Piers Steel define una espiral de éxitos como una serie progresiva en la que alcanzamos metas difíciles pero asequibles, superando las adversidades gracias a la tenacidad y perseverancia. La magia de este proceso se encuentra en la motivación.
Cuando nos encontramos en una espiral de éxito nuestra confianza no deja de mejorar. Según alcanzamos los primeros logros nuestra motivación crece de manera exponencial, pues le damos un significado a cada esfuerzo que aviva el deseo de luchar para conseguir más. Percibimos que cada meta o cada paso hacia adelante es posible gracias al que acabamos de dar. Y entramos en un ciclo en el que cada pequeño éxito produce más confianza, aumentando nuestro empeño por nuevos logros.
Usted puede poner en marcha espirales de éxito tanto en su vida profesional como personal. Son el mejor antídoto para el desaliento crónico de las personas que sólo esperan fracasar, pues los primeros avances les dan una experiencia de éxito muy viva a la que poder aferrarse y continuar la secuencia. El secreto está en empezar con pequeñas metas, en descomponer las tareas grandes en segmentos pequeños, y en prestar atención a las mejoras graduales conforme se van produciendo.
Tanto si nos encontramos en dominio profesional o el familiar, como si nos referimos al campo de la autoayuda, siempre existe una ruta para el crecimiento y para el desarrollo. Sólo necesita encender el fuego para poner en marcha la espiral. Seguro que merece la pena.
Notas
Si está interesado en conocer más sobre las espirales de éxito, Piers Steel las menciona en su libro sobre la Procrastinación. Está publicado en castellano por Grijalbo.