ESPIRITUALIDADES Y LIDERAZGOS
FELICIDAD NO ES ESPIRITUALIDAD
A veces
aparecen modas, que revestidas de cierto halo de misterio parecen ofrecernos,
o nos ofrecen directamente, la felicidad.
Ser capaz de distinguir la verdad de lo
superfluo, a veces, no es fácil. Pero es necesario.
Hace
unos días me llegó un correo ofreciéndome un “viaje espiritual” o al menos así lo anunciaban.
Pensaron que me podía
interesar.
En
realidad el viaje no me podía resultar menos atractivo o interesante: de todos
los sitios del mundo que se pueden visitar siempre he tenido claro que la India estaba fuera de mi lista.
Me reconozco
bastante escrupulosa, y para mí leer un libro es suficientemente
espiritual y aventurero, y disfruto como nadie de ir a sitios bonitos en
los que pueda comer bien con un mínimo nivel de higiene. Supongo que tiene que ver con que soy muy empática y no me
gusta ver a la gente pasarlo mal, por eso ayudo como puedo, pero no significa
que tenga que ir a verlo in situ.
Conozco
gente que ha ido a la India y lo que cuentan me parece bastante desagradable. Una compañera del trabajo, informática como yo fue a trabajar unos meses mandada por mi empresa, que es una multinacional.
Los
bichos no me gustan, y su visión está mucho más allá de lo que considero unas
buenas vacaciones, si es en sitios donde hay comida…bueno creo que he dejado
claro mi punto de vista. Me encanta que haya gente que vaya y lo disfrute. Pero
no es para mí.
¿ME PONE
CUARTO Y MITAD DE ESPIRITUALIDAD Y ME LO CORTA EN LONCHAS FINITAS?
Mucha gente cree que tienes que ser espiritual y que medito y hago
cosas que otros consideran espirituales.
Pues no.
MONASTERIOS BUDISTAS O CÓMO QUERER COMPRAR ESPIRITUALIDAD
Hay personas que piensan que tienes que ir a un monasterio budista o a un ashram (que es un monasterio hindú o algo así) para descubrirte o ser feliz, idea que me parece tan poco acertada como la de que si no tienes el último bolso no vas a sentirte bien: un concepto occidental basado en el consumismo, un “si me voy allí algo se me pegará”.
No todos somos iguales. No todos pensamos de la misma manera. No a todos nos sirven las mismas herramientas. Si funcionan para el 75% de las personas sigue habiendo un 25% a las que no les sirven.
¿CAMBIAR EL SISTEMA EDUCATIVO? Un ejemplo parecido de querer meter a todos en el mismo saco es cambiar el sistema educativo porque no funciona. Es cierto. Estoy de acuerdo con que un sistema educativo en el que los niños se diviertan más y puedan desarrollar sus cualidades y formas únicas de procesar la información es necesario. Sobre todo porque hay niños con cualidades que el sistema educativo actual no permite que se desarrollen, lo que es una pérdida para la sociedad y una fuente de dolor para los niños afectados. Sin embargo, al mismo tiempo que se dice que hay que cambiar el sistema educativo, algunas de esas mismas personas caen en el mismo error que ha hecho que el sistema educativo actual fracase: querer encuadrar a todo el mundo en el mismo saco, en el esquema propio. En lo que me funcionó a mí. Los niños deben usar ordenadores para estudiar, fuera libros, libretas y bolis porque así se aprende mejor, es decir, porque alguien, a veces personas que han creado una start-up y que saben nada de educación y de neurociencia lo dice. Si tenemos en cuenta que muchas de esas personas tienen Síndrome de Asperger (no diagnosticado la mayor parte de las veces) cometeremos un error mayor si les hacemos caso. Que alguien cree una start-up o un Zara no significa que de repente tenga conocimientos enciclopédicos como Leonardo Da Vinci. De esta forma se está discriminando a quienes pueden aprender mejor tocando las cosas e interactuando con otros, que viéndolas en una pantalla, y el uso de ordenadores excesivo fomenta un comportamiento autista que puede empeorar un Asperger muy leve, ya que la interacción con otros niños y el profesor se pierde, sustituida por un trance centrado en la pantalla. La ciencia, sin embargo, nos demuestra que se entiende y procesa mejor la información en papel que en una pantalla, y sí, también se recuerda mejor (para la mayoría). Eso no significa que no debamos usar ordenadores.
Por ejemplo a mí siempre se me dieron bien los números, por eso siempre quise estudiar informática, pero a mi hermana Ana no.
PARA QUÉ TE PUEDE SERVIR A TI 1. Si te hacen feliz los productos espirituales sigue usándolos 2. Por aparente autoridad que tenga algo o alguien, si crees que no va contigo después de probar, descártalo. Hablar desde una posición de aparente y falsa autoridad, algo que los políticos hacen con frecuencia no significa nada. 3. ¿Sobre qué tema sabes y no te das suficiente crédito? Conozco a muchas personas con grandes conocimientos sobre algunos temas pero no se consideran suficientemente preparados y no lo explotan. HAZLO. No creo nada probable que me veas escribiendo una entrada sobre SEO, aunque he leído bastante al respecto, a pesar de que he leído en bastantes blogs sobre SEO hablar hasta de la depresión. ¿Podría escribirla? Sí, por supuesto. Pero, aunque, entre tú y yo, no es física cuántica, no me parece honesto hacerlo. ¿Y tú qué crees? ¿Piensas que es necesario consumir productos espirituales para ser feliz?
Qué he aprendido de Monica Lewinski