1. EL MEDIO NATURAL COMO RECURSO.El medio físico aporta los recursos naturales y ejerce una gran influencia en las actividades humanas a partir de:
- El relieve, que influye en la agricultura, minería, transportes y comunicaciones, asentamientos, turismo, pesca, etc.
- El clima que puede resultar más o menos favorable para la agricultura, la distribución de la población, la producción de energías renovables, las comunicaciones y el turismo, etc.
- La hidrografía, que proporciona agua para usos consuntivos (regadío, industrial y doméstico) y no consuntivos (pesca y acuicultura, producción eléctrica, navegación y deportes).
- La vegetación, que ofrece recursos (materias primas, funetes de energía, alimentos, ocio, etc.) y contribuye a la protección y mejora del medio ambiente (conservación del suelo, disminución de la contaminación, etc.)
- El suelo, que condiciona el poblamiento, la producción agraria y las infraestructuras.
- riesgos climáticos (inundaciones, sequía, aludes, olas de frío y olas de calor, temporales de viento, tormentas con gran aparato eléctrico, etc.
- riesgos geológicos (movimientos sísmicos, hundimientos del terreno, desprendimientos, deslizamientos de ladera, etc.).
- otros riesgos como los riesgos biológicos (epidemias y plagas).
- la alteración del relieve continental y costero. Soluciones: informes de impacto ambiental y ley de costas.
- La contaminación del aire se debe a la liberación a la atmósfera de sustancias contaminantes y sus principales consecuencias son la lluvia ácida, el aumento del efecto invernadero, la disminución de la capa de ozono, la contaminación atmosférica de las ciudades y la contaminación acústica. Soluciones: limitación de las emisiones de contaminantes
- La sobreexplotación y contaminación de las aguas superficiales y subterráneas se debe, sobre todo a causas humanas, por actividades agropecuarias, industriales y domésticas. Soluciones: ahorro en el consumo y limitar los vertidos contaminantes.
- Los daños, alteración y destrucción de la vegetación, a causa de la contaminación, la sustitución de las especies autóctonas y la deforestación (talas e incendios). Soluciones: reforestación con especies autóctonas y prevención de los incendios.
- La contaminación (vertidos industriales y humanos, fertilizantes y abonos químicos), la erosión (natural pero acentuada por las actuaciones humanas) y la desertificación (es el proceso de pérdida de suelo fértil y vegetación debido fundamentalmente a la acción humana, que provoca una erosión excesiva). En España resulta un problema muy serio, porque el suelo es uno de los recursos naturales más escasos y amenazados, principalmente en el área mediterránea. Solución: Reforestación y control de los vertidos.
- Los residuos sólidos urbanos, que generan vertederos controlados, y también incontrolados que alteran el paisaje y contaminan a través de la incineración y los residuos. Solución: 3 R, Reduce, Reutiliza, Recicla.
- Los riesgos tecnológicos, como los derivados de la energía nuclear (posibilidad de escapes y accidentes).
- Depende del Ministerio de Medio Ambiente, Rural y Marino, y de las correspondientes administraciones públicas autonómicas y locales, pero siempre dentro de la denominada política medioambiental de la Unión Europea, que se desarrolla a través de la Estrategia Europea de Desarrollo Sostenible (EEDS).
- Los acuerdos internacionales (protocolos) suscritos por España, que implican el cumplimiento de compromisos para solucionar los distintos problemas medioambientales
- La prevención (evaluación del impacto ambiental), la implicación voluntaria de las empresas (iniciativas de responsabilidad corporativa) y la labor de las organizaciones ecologistas.
- Desde hace unos años se desarrollan una serie de medidas para preservar ciertos espacios considerados de especial valor ecológico mediante su declaración como espacios protegidos, que se dividen en cuatro grandes grupos: Parques (Nacionales y Naturales), Reservas Naturales, Monumentos Naturales y Paisajes Protegidos.