Vuelvo a invitar al blog (y disfruto haciéndolo) a una de mis escritoras favoritas: Almudena Grandes. Esta vez, vuelvo a presentaros un libro de relatos: 'Estaciones de paso'. Vuelvo a profundizar en su escritura y vuelvo a decir que me parece maravillosa, no sólo en el aspecto formal, también en lo que narra.'Estaciones de paso' son cinco historias fundamentales para aquellos que, algún día, pretendemos escribir algo decente.
"Demostración de la existencia de Dios" es el primer relato que abre el libro. Nos cuenta la rutina de una familia que ha sido machacada por la pérdida de un hijo. En "Tabaco negro" nos encontramos con una nieta que siente admiración por su abuelo, que regenta una sastrería de toreros. En "El capitán de la fila india" nos encontramos con una familia que discute de nuevo por el tema de la herencia. "Receta de verano" habla de alguien que tiene que madurar demasiado pronto. Finalmente llegamos a "Mozart, Brahms y Corelli", donde veremos el joven despertar sexual.
Las cinco son historias diferentes, pero todas tienen un nexo común: la adolescencia, o, mejor dicho, el paso de una edad inocente a una edad adulta. Es un libro que emociona y que también hace pensar por ejemplo en su relato más duro: "Receta de verano".
Me gusta como escribe Almudena Grandes y me gusta, especialmente, como escribe relatos. Tienen todo lo necesario: una introducción rápida, un nudo intenso y, finalmente, un desenlace interesante y nada cerrado. Ojalá vuelva a escribir pronto pequeñas historias porque realmente consigue transmitirnos la belleza de un gran libro. De 10.