Estamos en la recta final del 2010, un año que pasará a la historia como violento y catalizador de las ineficiencias de los gobiernos federal, estatal y municipal. Con copia a los poderes legislativo y judicial.
El país se hunde en un marasmo caótico, no se mueven las hojas de los árboles, parece que todo ha muerto y que la nación está entrando en estado de coma del que habrá de despertar hasta mediados del año que viene, cuando se designen candidatos a la elección para presidente de la república del 2012-2018.
Lo único perceptible son los espasmos del paciente, en lugar de convulsiones balaceras, en lugar de flatulencias granadas explosivas, en lugar de signos de quietud de un pre cadáver hemorragias por todos lados.
No se observa un Estado fallido, se observa un Estado de coma.
La cosa esta jodida…