Cartel para la manifestación del Día de la Mujer en España / 20Minutos (Archivo)
Era la madrugada del 25 de marzo de 1911, cuando las llamas se apoderaron de la primera planta de la fábrica de camisas Triangle Shirtwaist de Nueva York, había unas 1.500 personas trabajando, la mayoría mujeres inmigrantes de Europa del Este e Italia. El incendio empezó ascender por los ocho pisos del edificio y fue una ratonera para muchas mujeres que acabaron lanzándose por la ventana para intentar salvar sus vidas, sin embargo, 52 de ellas murieron al estrellarse contra el suelo, según relata el diario ABC del día después.
El panorama que se describe en el periódico es dantesco: mujeres arrojándose por las ventanas, otras intentaron descender por los cables de la electricidad que se acabaron rompiendo, en el pozo de ventilación hallaron veinte cadáveres carbonizados y en el octavo piso 50 muertos más. Finalmente, 146 fallecieron en aquel incendio, 23 hombres y 123 trabajadoras textiles, la más joven tenia 14 años y la mayor 46.
Las trabajadoras textiles de Estados Unidos llevaban años denunciando las malas condiciones laborales en las que trabajaban. De hecho, en este país, también fue la primera vez que oficialmente se celebró el Día de la Mujer, fue un 28 de febrero de 1909 en Nueva York. Con ello se quería honorar a las manifestaciones y protestas que las trabajadoras de este sector estaban realizando tanto en Nueva York como en Chicago.
Y, precisamente, este incendio marcó un antes y un después en las reivindicaciones laborales de las mujeres. Los responsables de las fábricas habían cerrado todas las salidas y las escaleras de emergencia para evitar cualquier manifestación o protesta. Por eso, cuando en la primera planta del edificio se originó el fuego, las trabajadoras no pudieron huir del recinto. Esta tragedia sirvió para que se reformara la legislación laboral de Estados Unidos y, a nivel mundial, se creara el Sindicato Internacional de Mujeres Trabajadoras Textiles
También propició de impulso para que se creara el Día Mundial de la Mujer. Precisamente, un año antes, en Dinamarca, se había celebrado la II Conferencia Internacional de Mujeres Socialistas, en la que participaron un centenar de trabajadoras de diecisiete países que acordaron por unanimidad que el 8 de marzo fuera el Día de la Mujer. Finalmente, en 1977 la ONU designó esta fecha para conmemorar en todo el mundo a la mujer.
¿Cuál es la actual situación laboral de la mujer en Estados Unidos?
Nadie puede negar que desde ese trágico 1911 han pasado más de cien años y la situación laboral y salarial de la mujer ha mejorado mucho en Estados Unidos, pero aún siguen habiendo algunas deficiencias para que su condición sea igual que la de sus colegas hombres.
Según un informe publicado en diciembre de 2014 por la Oficina de Estadísticas Laborales de Estados Unidos, en el 2013 las estadounidenses que realizan una jornada laboral completa gana el 82 % de lo que percibe hace un hombre. Aunque, obviamente, representa una mejora sustancial antaño (en 1979 por ejemplo, el salario de una mujer era el 62 % que el de un hombre), pone de relieve que la igualdad salarial no se ha conseguido en este país
Pero el estudio también resalta que existe un componente racial en el trabajo. El salario medio de una mujer en 2013 en Estados Unidos fue de 706 dólares, frente a los 860 de un hombre. Sin embargo, el sueldo de las mujeres asiáticas asciende hasta los 816 dólares, frente a los 722 de las blancas, los 606 de las afrodescendientes y los 541 de las hispanas.
También hay una menor participación de la mujer en el mercado laboral que es del 57,2%, respecto al 70,2% de los hombres. En el caso de las mujeres divorciadas esta cifra se dispara hasta el 64,7 % y en el de las mujeres casadas es del 58,9%. En el caso de los hombres, estas cifras son a la inversa: el 74,2% de los hombres casados trabajan frente al 66,8% de los divorciados.
Otro de los estereotipos que sigue haciendo mella es el de que hay profesiones para hombres y mujeres, por los que hay oficios en los que existe una sobre representación del sexo femenino frente a otros en los que apenas participan. Así pues, mientras en campos como la educación y la salud las mujeres son el 75 %, en actividades financieras (53%), en ocio y hostelería (51%) y en otros servicios (52%), en los ámbitos de agricultura y transporte solo representan un 24% en ambos trabajos, en la minería (13%), en construcción (12%) y en la industria manufacturera (9%).
Aún así, Estados Unidos está por encima de la media mundial donde la mujer gana un 77% del sueldo de un hombre. En este contexto, la Organización Internacional del Trabajo (OIT) ponía esta semana de relieve que aún tardaremos 71 años en conseguir la igualdad salarial entre hombres y mujeres.