Estados Unidos, Rusia y tratados nucleares

Hay cosas peores que una Administración ineficaz o inepta, pero las hay: una Administración ineficaz, inepta y que además oculta información a la opinión pública o no hace nada para que se conozcan datos importantes. La Administración Obama, en su línea, se lleva las tres papeletas y gana el premio gordo.
Los informes de inteligencia de las distintas agencias federales que maneja la Administración son claros y tajantes: Estados Unidos está cumpliendo a rajatabla los tratados internacionales firmados sobre desarme nuclear, control de armamento y no proliferación nuclear, que son vinculantes. Pero Rusia se está haciendo la longuis y no está cumpliendo con lo firmado. ¿Deberíamos sorprendernos? Los que llevamos en este trabajo años, desde luego no nos sorprendemos, y más conociendo a Mr. Putin. Sin embargo, la Administración Obama parece no darse por enterada y prefiere adoptar una actitud de mirar para otro lado (en su línea de esconder la cabeza en el c...).
No será porque no tiene unos cuantos informes de inteligencia alertando del incumplimiento de Rusia de los tratados de desarme, que podrían tener gravísimas consecuencias. El Tratado sobre Fuerzas Nucleares de Alcance Intermedio (INF), que suscribieron Ronald Regan y Mijail Gorbachov, en 1987, se lo están pasado por el Arco del Triunfo... es un decir, con violaciones del mismo un día sí, otro también, y al tercero vamos a repetir la violación. ¿Me preguntan cuál es la violación? Pues, por ejemplo, Rusia ha realizado pruebas y desarrollado misiles de crucero lanzados desde tierra; sí, hombre, los famosos GLCM, que prohíbe expresamente el mencionado tratado. Lo dicho: por el Arco de Triunfo y sus S.C.
La lectura que está haciendo la Administración Obama de los tratados de desarme para permitir estas violaciones rusas, son cómicas, de risa, muy al estilo de algunos y algunas funcionario/as de alto nivel que parece que tengan los ojos en sálvese la parte. Porque para lo que ven... Y es que además la Administración Obama está omitiendo información crucial a la opinión pública. Por cierto, no he oído a la candidata Clintonita quejarse del tema. ¿Será que ella pensaría actuar igual llegado el caso? ¿Seré un mal pensado? Va a ser eso...

Otro punto grave del asunto es que los informes de inteligencia que alertan de los incumplimientos rusos, no se reflejan en los informes oficiales del Departamento de Estado. Será que se les ha pasado de incluir... Con tanto trabajo, es comprensible...
Uno se diría a sí mismo que ante la primera violación, la Administración Obama reaccionaría. ¿Lo ha visto usted? Yo tampoco. Las violaciones rusas en distintos tratados de desarme no es que sigan produciéndose, que siguen, es que se han convertido en franca desfachatez, incumplimientos a lo bestia, nada sutiles. ¿Para qué? Si esta Administración no reacciona, no sabe, no ve, no contesta, no escucha, no analiza... en realidad no parece que haya nadie mínimamente competente donde debería estar.
La retahíla de incumplimientos de tratados por parte de Rusia es larga, pero una se va llevar la palma: el Tratado de No-Proliferación nuclear, que amenaza con dejar a Estados Unidos sin capacidad de respuesta ante la eventualidad de ataques rusos.
¿La buena noticia? Que pronto llegará un presidente republicano y pondrá las cosas en orden. Y a Rusia donde le corresponde y acatando lo que ha firmado. Para empezar, hay cuatro acciones que debería impulsar Estados Unidos: obligar a Rusia a cumplir los tratados suscritos, situar tropas y armamento en Europa, impedir que Rusia domine el suministro mundial de energía y aumentar las capacidades defensivas de Estados Unidos.