Estafa

Cada vez abundan más las estafas por red y/o telefonía móvil. Personalmente no llamaría jamás a un número de tarificación especial, ni de esta clase ni de otra, y menos llegar a soportar 45 minutos de conexión con disculpas diversas para incrementar el tiempo empleado y facturar una cantidad superior al poco precavido usuario. En todo caso, este tipo de delitos no está tan lejos de los carteristas de antaño, y son acciones de “guante blanco” que no ponen en peligro nada más allá de unos cuantos euros -tampoco excesivos- de la cartera que ciertos incautos ofrecen, casi sin esfuerzo, al avispado delincuente de turno. Que les caiga poca pena y que les cierren el chiringuito.