EL VICIO ES PURA SUGESTIÓN de Oyarzabal
Me he decidido a hacerlo. Algún día tenía que ser. Me paso en el trabajo 8 horas pendiente del móvil, intenet, los correos electrónicos, los programas de diseño, el de facturación, los ploteres de corte y dibujo y la programación de los autómatas. Vuelvo a casa y sigo con la bitácora, el Auto Cad, el Pascal……. ¡Vale! Me he demostrado cien veces a mí mismo que no estoy enganchado a nada y que puedo prescindir de aquello que no crea necesario.
Pues bien. Lo voy a intentar. Se terminó el móvil. Caput. En el trabajo la conexión a internet queda reducida a 15 minutos y a la hora de la salida para evitar tentaciones (tenemos programados los ordenadores para que se desconecten a la hora de salida). En casa na de na. Cura depurativa de nuevas tecnologías.
Deseo comprobar si me acompañan sudores cuando vea a la gente disfrutando de la tecnologías de la comunicación. Y sobre todo quiero saber si tengo la línea telefónica inyectada en vena. Lo he comentado a los que me rodean y las sonrisas han sido anchas. Pero….¿me pueden asegurar que por el hecho de estar conectados están más acompañados?, ¿seguro que es cierto que el poder hacer más cosas a la vez significa más rentabilidad?, ¿es verdad que no tengo un problema de adición y que puedo prescindir de las nuevas tecnologías cuando quiera y durante el tiempo que desee?
Pues bien, amigos. Ya sabéis. Este es el último artículo durante una temporada, espero. Va por todos vosotros.