Barceló Istanbul
Descubre los beneficios del hamam en el recién estrenado centro de wellness y fitness del Barceló Istanbul, desde el que se observan unas preciosas vistas de Estambul.
Si este verano tienes pensado escaparte a Estambul, no pierdas la ocasión de probar un ritual que durante siglos encandiló a los sultanes del Imperio Otómano, y que aún hoy en día forma parte del día a día de muchos turcos: el hamam. Además de relajarte, lograrás eliminar todas las impurezas de tu piel, y que ésta recupere su tersura y luminosidad. Opta por visitar alguno de los hamames que hay por la ciudad, o alójate en un hotel como el Barceló Istanbul, que cuenta con uno precioso en su centro de wellness y fitness.
Ritual del hamam:
Los profesionales recomiendan hacer una sesión de sauna de al menos 5 minutos antes del inicio del hamam, con el fin de abrir los poros y facilitar la posterior exfoliación. Tras ello, y una vez cubiertas las partes íntimas con una toalla turca tradicional llamada pestemal, te podrás colocar encima del hamam. Enseguida notarás el efecto que el calor que desprende la placa de mármol del hamam genera en tu cuerpo, sintiendo una absoluta relajación.
Tras humedecer la piel con baños de agua fría y caliente, la terapeuta iniciará el peeling, una de las fases más importantes de este ancestral ritual. Gracias a la destreza de los profesionales, y a la eficiencia de los guantes de kese, lograrás eliminar gran parte de las células muertas de tu piel, al tiempo que notas cómo se activa la circulación.
Tras ello llegará la parte más agradable del tratamiento. Una vez quitada la piel muerta, se procederá a cubrir el cuerpo con una envoltura jabonosa, que se posará en tu cuerpo mágicamente gracias a unos movimientos tradicionales que consisten en introducir una tela impregnada de crema en agua, agitarla en el aire para que cree espuma y posarla en tu piel pasando la mano y haciendo presión sobre ella.
Podrás descansar con la envoltura durante unos 5 minutos, el tiempo necesario para que te hagan un masaje relajante en la cabeza y te limpien el pelo con una solución hidratante. A continuación llegará el momento de asear el cuerpo de cabeza a pies con agua fría y caliente, te cubrirán con sendas toallas y podrás pasar a la sala de relajación, dónde te servirán un té y podrás finalizar la experiencia tomando una deliciosa y refrescante fruta.
Beneficios del hamam:
El hamam está considerado como un tratamiento de reyes, y es que por algo era una de las actividades preferidas de los sultanes, y no hay palacio turco que se precie que no disponga de uno. Si te animas a probarlo, toma nota de algunos de los muchos beneficios que podrás obtener:
1. Deja la piel limpia, tersa y luminosa.
2. Genera un efecto absolutamente relajante.
3. Reduce el estrés y evita el insomnio.
4. Favorece la respiración gracias a su poder expectorante.
5. Mejora la circulación sanguínea.
¿Quieres un hamam sólo para ti y tu pareja?
Si quieres disfrutar de esta experiencia en la intimidad con tu pareja, y haceros vosotros mismos los tratamientos, el Barceló Istanbul cuenta con habitaciones Deluxe de 48 metros cuadrados que disponen de su propio hamam. Y para ocasiones verdaderamente únicas, el hotel ofrece la posibilidad de gozar de su Suite Sultán Penthouse, de 250 metros cuadrados, espectaculares vistas de la ciudad y un hamam digno de un sultán.