Estefanía González es, entre otras cosas, filóloga. Pero Estefanía González es, ante todo, sobre todo, por encima de todo, poeta. Este sábado estuve tomando con ella un par de cañas y charlando de un proyecto que nos traemos entre manos y del que iré comentando más cosas cuando llegue el momento. Pronto, este mismo mes, Estefanía edita su segundo poemario, La raíz encendida, del que daremos cumplida cuenta por aquí. Mientras, para que vayas conociendo su poesía, le dedicaré dos post con poemas de su primer libro: Hierba de noche. Te dejo con dos de ellos:
LA TRANSPARENCIA
Aún me estremecey ya lo he olvidado.No había cielo.Solo esas nubes sólidas.No había viento.Ardía el airey la pielah.La ola era enorme.
NO CESA EL MAR de batir.
Resguardada en el nido de redes
respiro un viento muy caliente.
Viene otra temporada de temblor.
Una montaña de granito se acerca
vertical desde el horizonte.
Ríos veloces fluyen hacia mí de piedra.
Pueblos, senderos enredados en el aire
y restos de juguetes y de barcos. Todo.
Todo arrastrado.
Se lanzan gaviotas
contra este cielo.
La agitación en el mundo
y una columna de luz
desde lo alto
abriendo el agua.
Estefanía González. Hierba de noche. Ediciones Centro de Gravitación Poética, 2013. Ilustración de portada: Pablo Avendaño (Artefactos en Nájera).