Kay O'Toole - Un Palacio en tres estancias - Houston
Cuándo decidió construir la casa de sus sueños, esta anticuaria lo tenía claro, buscaba un concepto de elegante sencillez pero marcado por la pátina del tiempo. Con el resultado, y el aspecto, de una villa del viejo mundo, al estilo mediterráneo.
La Fachada
Ya en la fachada se percibe la importancia de la simetría en la composición de esta vivienda. Y la simplicidad en las formas.
Algunos objetos vintage decoran este recorrido hacia el resto de las estancias. Intuyendo que nos espera... un paseo, por un pequeño museo de piezas especiales.
El Pasillo
Algunos objetos vintage decoran este recorrido hacia el resto de las estancias. Intuyendo que nos espera... un paseo, por un pequeño museo de piezas especiales.
El Salón
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Cómo si de una princesa retirada se tratara, así los detalles en esta casa nos lo señalan... sutilmente femenina.vía
Es aquí, en el salón, donde más se percibe la constante repetición de simetría, simetría, simetría. La estructura arquitectónica, reforzada por la disposición de los muebles, hace que el resultado sea totalmente clásico.vía
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Suelos de madera oscura, paredes blancas, carpintería blanca y algunos pocos muebles de madera oscura, y tapizados en blanco, como eco al estilo colonial.vía
Lo único que podremos encontrar algo "sobrecargado" es este rincón. Pero con ese lienzo en blanco de alrededor, con toda esa luz natural que inunda la estancia, y con todo ese vacío que le rodea, el resultado es muy equilibrado.La Cocina
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Blanco sobre blanco, juego monocromático. Muebles de lineas sencillas, acabados envejecidos pero no en exceso. La cocina es, en conjunto, menos noble que el resto de habitaciones, pero igual de hermosa. Un pequeño descanso para nuestro sentido artístico y visual, probablemente para poder concentrarnos en lo que aquí importa, la comida y la tertulia.vía
Comedor y cocina en el mismo espacio, como en las antiguas viviendas de campo.El Dormitorio
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La vista es conducida, por el ligero dosel de forja de la cama, hacia arriba. Dándonos cuenta, quizás por primera vez, de la altura del techo y contemplando extasiados ese regalo que ahí nos espera: un antiguo lienzo.vía
El Exterior
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También aquí podemos ver piezas de anticuario, casi como si fuéramos encontrando tesoros ocultos a cada paso, escondidos en este descuidado jardín... Probablemente proyectado de esta forma, para subrayar aún más esa sensación de descubrimiento.