Algunos todavía seguís menospreciando eso que se ha venido en llamar networking, pero igual que se dice que de una boda siempre sale otra boda, de un evento, si te lo curras bien, puede que te salga otro evento.
Así ha sido el caso.
En uno de los últimos eventos en los participamos el año pasado, surgió la conversación y se sembró la semilla de lo que en unos meses ha terminado siendo una doble colaboración. De una de ellas ya os he hablado aquí; de la otra, la que tendrá lugar mañana aprovechamos la entrada de hoy para hacerlo, que hace ya unos días que no os contaba nada.
Este lunes por la tarde me pondré rumbo a tierras asturianas para impartir el martes un taller de liderazgo para mandos intermedios en entornos sanitarios: para mí un auténtico caramelo que me permitan hablar de una de mis pasiones, y aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid, le daremos un repaso, entre otras muchas cosas al Liderar con el corazón, en el que tuvimos la suerte de colaborar con el amigo Joan Carles March, y otro buen montón de profesionales expertos en ambas cosas: liderar y corazón.
Para ir abriendo boca, vamos repasando los seis errores más comunes de los managers de equipo que publicaban los compañeros de equipos&talento la semana pasada:
1. Desentenderse de la vida personal de los empleados: No es necesario, ni mucho menos, llegar al punto de ser el confidente de los empleados, pero sí que debería interesarse por la situación personal de cada uno de los miembros de su equipo. 2. Dar instrucciones poco claras al equipo: Algunos managers son poco claros a la hora de dar directrices o decir a su equipo lo que se espera de ellos en cada proyecto. Es importante que ayudes al manager a establecer prioridades para que el equipo pueda identificar cuáles son las tareas realmente importantes. 3. No confiar en las posibilidades de su equipo: Cuando un manager no confía en la profesionalidad de sus trabajadores puede desencadenar otros daños. Revisar cada detalle del trabajo del equipo o incluso ser incapaz de delegar ciertas tareas por miedo a que se hagan mal crea una sensación de desconfianza dentro del equipo que al final se traduce en poca motivación y dedicación por parte de los trabajadores. 4. Tomar decisiones sin pedir opinión: En estos casos los trabajadores pronto se dan cuenta de que sus ideas y propuestas no se toman en cuenta y eso resulta muy poco motivador. Un manager debe aprender a escuchar activamente a cada una de las personas que integran su equipo, ya que pueden ofrecer un punto de vista más real en algunos aspectos de trabajo y sus observaciones pueden contribuir muy positivamente a la mejora del departamento. 5. No saber reaccionar ante los problemas: Esperar a que los problemas o conflictos entre empleados se resuelvan solos es lo peor que puede hacer un manager. Un manager debe de ser capaz detectar posibles problemas y conflictos y buscar una solución antes de que la cosa sea irrecuperable. 6. Tener favoritismos: Si un manager muestra diferencias en cuanto a escuchar la opinión o preocuparse del bienestar de unos u otros trabajadores, inmediatamente se crearán diferencias entre los propios trabajadores. Un manager debe tratar y escuchar por igual a todos sus empleados. Es normal que a nivel personal pueda tener más afinidad con ciertos trabajadores que con otros, pero eso no debe afectar a su relación como manager con el equipo. Autor Iñaki Gonzalez. http://sobrevivirrhhe.com/C. Marco