1. Estilo juvenil: lo que yo sí, y lo que yo no.
Hay prendas que, simplemente no es que me parezcan “bien o mal”, sino que no cuadran con mi manera de vestir. Por ejemplo, las tan amadas “Sneakers” no es que me disgusten, pero teniendo en cuenta que a menudo uso vestidos o faldas y que cuando llevo vaqueros – que también – suelo optar siempre por algunos detalles coquetos…no me encajan. He visto chicas con zapatillas y vestido que realmente están monas y encantadoras, pero eso sí que lo veo más propio de alguien más joven que yo. Sin embargo, otras prendas como los minivestidos o los colorines intensos, que a veces se asocian con un estilo joven, a mi me encantan. Me veo favorecida con ellos y no me corto un pelo en usarlos. Algo que aún me genera “controversia” a mi misma son ciertos complementos para el pelo. Mi hija pequeña (el colmo de la “coquetidad” a menudo me pregunta, “Mamá, ¿por qué nunca te pones pinzas o cintas en el pelo?” y me sale la respuesta “prejuiciosa”: “Porque es de niñas o mujeres muy jovencitas”. Pues reconozco que, como os digo, es algo prejuicioso porque tengo amigas algo más mayores que yo los luce con mucho arte.
2. El miedo a “lo clásico”: me niego. Aunque como os decía, no considero yo que tenga un estilo muy definido, lo cierto es que los cortes clásicos me encantan. Me parecen muy elegantes (faldas lápiz, vestidos a la rodilla, pantalones de “vestir”…), femeninos y favorecedores. Como todo, este tipo de prendas tienen sus momentos: no voy a ir al súper con un vestido años cincuenta, pero sí me gusta tirar de este tipo de propuestas cuando quiero arreglarme más. De esta forma, hay ciertas tiendas que antes me parecían “demasiado clásicas” y ahora sí que me gustan para cotillear y picar con cositas. Como os comentaba antes, todo depende de cómo lo combinemos con complementos y maquillaje.
3. Y ellos, igual.
Me encanta esta americana:
tiene un color poco visto
pero a la vez fácil de llevar.
¿Tenéis trabas con las prendas más juveniles o más clásicas? ¿Os negáis a utilizar algún complemento por pertenecer a estos estilos, o miráis más bien cómo os sienta que otra cosa? Ya me contaréis. ¡Besos!