SINOPSIS
Este es el libro más luminoso, impactante y real que alguien puede escribir. Tras una niñez marcada por los abusos sexuales, años de eterno acoso escolar y una hipersensibilidad que en no pocas ocasiones lo llevó al borde del suicidio, Alejandro Palomas hila en estas páginas un relato sereno y electrizante con el que sobrevuela sin filtro los recuerdos de infancia, la relación sin igual con su madre, la sombra de un padre finalmente desaparecido y el poder de la imaginación y de la escritura como la última tabla de salvación. Este es el testimonio más sincero de un hombre que apostó por vivir y que lo consiguió gracias a su pasión por inventar y compartir mundos, siempre desde la ternura y el humor, y que ahora transforma su vida en la mayor de las historias.
La literatura le permitió crear universos imaginarios mejores que la vida que le rodeaba y con los años estas ficciones le han ayudado a encontrar las palabras para mostrar toda la verdad.
RESEÑA
La verdad es que no sé muy bien cómo empezar esta reseña, porque es un libro autobiográfico de un escritor que, no solo está vivo, sino que ha sufrido demasiado. Y no sé cómo opinar o reseñar una autobiografía, si os soy sincera. Así que simplemente os voy a hablar de todo lo que este libro me ha removido.
Tengo que confesar que siempre he sido malísima a la hora de expresar mis sentimientos, y si es hablando, más todavía. Escribiendo, como hay tiempo para pensar, para borrar, hay más silencio… acabo sacando lo que tengo dentro (y eso que escribir un diario siempre me ha costado muchísimo).
Ha sido muy duro leer el testimonio de Alejandro Palomas, no solo de su violación, de los abusos y del bullying, sino de sus temores más profundos a perder. Perder a su madre, concretamente. Y en este libro se abre totalmente a sus lectoras (porque somos mayoría mujeres) y nos cuenta lo que ha supuesto para él su pérdida, la de Rulfo (cómo lo sentí) y cómo lo sobrelleva ahora.
Es un libro que no deberíais leer a la ligera, sobre todo si sois personas empáticas os puede afectar un poco. A mí me dejó con las ganas de querer darle un abrazo, sabiendo que ya no le provocan rechazo o repelús.
Y lo último que tengo que decir es que ha sacado a la superficie dos de mis temores más profundos: qué será de mí si pierdo a mis padres y qué será de mí si mis futuros hijos sufren bullying. Porque una vez lo has vivido tú, puedes pensar “bueno, así sé cómo reaccionar si alguien de mi entorno lo sufre”… tremenda mentira es esa.
Os recomiendo su lectura pero en pequeñas dosis. No os dejéis engañar por la manera de escribir que tiene Alejandro Palomas de que siempre queramos saber más. Creedme… en este libro hay que ir preparado para saber todo lo que tiene que contarnos. No es una lectura que se disfrute, desde luego.