Revista Infancia
FUENTE:Autismo en escuela
Imagine por un momento que todos sus sentidos perciben con mucha intensidad. No puede discriminar ninguno de los sonidos que escucha, y todo tienen la misma importancia para su oído. Percibe todos los olores, las luces le lastiman y no puede encontrar las cosas que busca porque todo parece tener la misma importancia para sus ojos, observa todos y cada uno de los detalles. La ropa le pica o le aprieta, las etiquetas le molestan. No sabe dónde está parado, qué postura tiene, se marea fácilmente. Percibe los sabores y las texturas de los alimentos con mucha intensidad.
Ahora, trate de imaginar lo que sentiría en un salón de clases con 30 compañeros, en un espacio limitado, todos hablando y moviéndose al mismo tiempo. Afuera del salón hay otros sonidos y pasan muchas cosas. Para conservar el orden la maestra debe alzar la voz, así que su grito a usted le lastima, de hecho, le duele.
Le piden que ponga atención a alguna explicación, que no se mueva y mire a la maestra a los ojos. A usted le cuesta mucho trabajo mantenerse sentado sin hacer nada en su lugar. Necesita moverse para sentirse bien, pero si usted se levanta o se mueve demasiado la maestra le llamará la atención por interrumpir la clase.
Si la mira a los ojos no se puede concentrar en lo que dice. Sus ojos le distraen, le incomodan, quiere ponerle atención a lo que dice pero para usted verla a los ojos al mismo tiempo... es demasiado...