Estoy sin dinero, necesito un préstamo con urgencia y la verdad, ya no sé qué hacer. La situación está cada vez más dura, tengo obligaciones y compromisos adquiridos y a falta de dinero, poco a poco me estoy desesperando y no sé dónde esconderme en estos momentos.
¿Cuántas de las personas que están leyendo esto, están ahora mismo viviendo una situación semejante?
Cuando el dinero escasea, las cosas pareciera que se vuelven más difíciles de lo acostumbrado, y es que, debemos aceptarlo, vivimos en un mundo en donde el dinero se necesita a diario para poder vivir con tranquilidad.
¿Qué se puede hacer cuando se está en una situación así?
A continuación encontrará un listado de medidas desesperadas que toda persona que se encuentra en dificultades económicas, debe poner en práctica mientras todo se soluciona y regresa a la normalidad.
Lo primero que debe hacer una persona cuando el dinero escasea, es revisar minuciosamente los gastos que tiene, y comenzar a recortar al máximo posible todos aquellos gastos que son innecesarios.
Hay muchas personas que, en una situación de escasez económica fuerte, pretenden seguir viviendo su vida como la vivían cuando el dinero abundaba, y eso es una locura que simplemente complica aún más la situación.
Cuando las cosas se ponen difíciles, la única salida posible es comenzar a restringir todos los gastos.
Lo único que importa es tener dinero suficiente para poder comer al menos una buena comida cada día. Todo lo demás que se sale de allí, debe pasar a un segundo plano. La conservación de la vida es lo único importante. La vida es lo único que realmente cuenta y todo lo demás como el lujo, las joyas, los clubes, las fiestas, los automóviles, las vacaciones, etc., deben dejar de tener toda clase de importancia.
Si usted vive en una casa que no le pertenece y paga un alquiler, pues entonces deberá contemplar la posibilidad de irse a vivir a un lugar aún más económico. Si la situación es apremiante y la escasez de dinero es evidente, entonces las medidas drásticas podrán hacer que la carga se sienta menos pesada.
De cierta forma, es como estar nadando en una piscina con ropa y con un abrigo encima. Al comienzo, es muy posible que la ropa no sea un obstáculo para poder nadar, pero pasados unos momentos, la ropa se convierte en una pesada carga de la que hay que deshacerse cuanto antes. Si una persona cae al agua y está vestida de los pies a la cabeza y se resiste a abandonar sus ropas, muy seguramente esas ropas se encargarán de ahogarle.
De esa misma manera se debe pensar cuando el dinero escasea y no se vislumbran posibilidades reales a corto plazo para mejorar la situación.
Todo aquello que no sea estrictamente necesario, debe suprimirse por completo. Lo único que realmente importa, es poder garantizar la vida a través del alimento necesario para que el cuerpo pueda mantenerse activo.
Si se vive en una casa propia en donde se pagan las cuentas de los servicios públicos tales como agua, alumbrado, gas natural, televisión por cable, teléfono, etc., de igual forma se debe contemplar la posibilidad de poner en arriendo ese inmueble e irse a vivir a un lugar más económico por un tiempo, mientras todo se soluciona nuevamente, o vender ese inmueble para, con el dinero que se obtenga, pensar seriamente en crear una oportunidad de generación de ingresos que permita salir adelante de esta situación.
Respecto a esto último, si no se tiene muy claro qué negocio se puede desarrollar con ese dinero, la mejor opción será mantener ese dinero en un banco, en una cuenta bancaria que rinda al menos un pequeño interés, y dejar esos recursos completamente quietos, so pena de evitar gastarlos y quedar en una situación peor que la anterior.
Si sus ingresos actuales le permiten seguir viviendo en donde vive, entonces olvídese de vender su hogar porque es muy probable que después no sea capaz de recuperarlo, y eso le hará quedar en una situación mucho peor, con el agravante de poder caer en un estado depresivo generado por haberse quedado sin una vivienda propia en donde vivir.
Revise muy bien los gastos actuales en su hogar. Siéntese y mire de qué manera puede economizar dinero haciendo recortes en el consumo de su vivienda en lo que al tema de los servicios públicos domiciliarios se refiere.
Acostúmbrese a apagar todas las luces de su casa que no esté utilizando. Incluso, desconecte todos los equipos electrónicos que no use. Aunque no lo crea, así los equipos estén apagados, ellos estarán consumiendo siempre al menos una pequeña cantidad de energía eléctrica.
Electrodomésticos como el refrigerador, consumen grandes cantidades de energía sobre todo porque permanecen encendidos 24 horas al día, 365 días al año. Pruebe a desconectar su refrigerador al menos durante dos horas en la mañana y dos horas en la tarde cada día. Esta simple práctica le ayudará a economizar dinero en el consumo de energía eléctrica.
Si usted paga por el servicio de televisión, considere la posibilidad de suprimirlo completamente. Nadie se ha muerto aún por no ver televisión, y el dinero que gasta en ese servicio, le servirá para por lo menos asegurar una alimentación de mejor calidad.
Si tiene alguna clase de automóvil o motocicleta que no esté usando para generar dinero, pues comience a pensar seriamente en la posibilidad de usar ese vehículo para generar dinero, uniéndose a empresas como Uber, inDriver, etc. Si eso no está dentro de sus opciones, entonces ponga en venta su automóvil o motocicleta, y utilice ese dinero para pensar en hacer algo que le genere algo de dinero adicional que le permita estabilizar su situación o incluso salir de ella.
A cambio de ese medio de transporte que solo le genera gastos, puede pensar en adquirir una bicicleta para desplazarse de un lugar a otro. Será algo divertido que, además, le ayudará a mantenerse en forma y a ver el lugar en donde vive con otros ojos.
Comience a pensar en la posibilidad de trabajar en lo que sea. Supongamos que usted es un prestante ingeniero que se ha quedado sin empleo de la noche a la mañana. Pasó de ganar mucho dinero cada mes, del cual nunca ahorró ninguna cantidad, a tener cero dinero en sus bolsillos. Frente a esta situación, cualquier trabajo que consiga y cualquier ingreso que logre generar, será mejor que no estar haciendo nada.
Mientras trabaja en ese trabajo que tal vez no esté “a su altura”, podrá comenzar a buscar otros trabajos más relacionados con su experiencia laboral y profesional. Mientras llega la oportunidad nuevamente, ese poco dinero que pueda conseguir en su trabajo menor remunerado, le ayudará a mantener la esperanza pese a lo difícil de la situación.
Sobre esto último, uno de los consejos más importantes, es olvidarse de lo que puedan decir o pensar aquellas personas que le conocen. La imagen personal es algo que debe dejar de tener importancia cuando las cosas se complican. Con seguridad que, si usted estuviera en medio de un incendio, poco o nada le importarían sus títulos, su educación, sus diplomas, su apariencia personal. Lo único que tendría importancia para usted en ese momento sería su vida. Pues bien, de esa misma forma debe comenzar a pensar cuando la situación económica se hace difícil y el dinero escasea por completo.
Piense de manera diferente
Acostúmbrese a pensar de una manera diferente. Si lo que ha hecho durante toda su vida para ganarse el sustento, ya no le produce el dinero suficiente, pues entonces ha llegado la hora de comenzar a pensar seriamente en otras opciones y posibilidades.
El estancamiento es algo que dificulta las cosas cuando la situación económica se hace difícil. La falta de creatividad y el miedo a intentar algo nuevo y diferente, hacen que el panorama se vea cada vez más oscuro.
Hay muchos casos de personas que, en medio de una crisis económica, descubren que eran muy buenos para algo que desconocían por completo y han terminado alcanzando el éxito, haciendo cosas completamente diferentes de aquellas para las que se creían más capacitados.
Pensar por fuera de la caja, salirse de los moldes y de los esquemas mentales que se tienen, ayuda notablemente cuando de conseguir dinero se trata.
Venda todo aquello que pueda generarle dinero y que no esté utilizando. Revise en su hogar qué cosas podría poner en venta y con las que podría generar al menos un pequeño capital para iniciar un negocio que le genere dividendos.
Recuerde que, frente a situaciones desesperadas, hay que tomar medidas desesperadas eso sí, pensando siempre con cabeza fría.
La vida es una completa incertidumbre y lo que hoy es, mañana puede cambiar completamente. Muchas personas en el mundo se han ido a dormir una noche cualquiera siendo adineradas, y han despertado al día siguiente en la ruina.
Todo en este mundo cambia constantemente y nadie está exento de un revés en las condiciones económicas. Si esa situación aparece en cualquier momento, pues se deben tomar medidas drásticas para contrarrestar los efectos de ese cambio.
Si bien no es fácil pasar de tener dinero a no tenerlo, no es una situación para perder la cabeza. A veces solo es necesario resignarse, respirar hondo y hacer algunos ajustes para que todo vuelva a la normalidad.
Resistirse y luchar desesperadamente, es algo que no siempre trae consigo la solución que se busca. En casos de extrema urgencia económica, solicitar un préstamo puede solucionar todo cuando se sabe muy bien en qué se invertirá ese dinero que se ha pedido prestado. Si esto no sucede, un préstamo de dinero puede tan solo empeorar aún más las cosas.
Nunca se debe olvidar que lo único realmente importante, es la vida. Todo lo demás, sobre todo las cosas materiales, no tienen ninguna importancia. Al fin y al cabo, cuando nos llega la hora de morir, todo cuanto hemos conseguido y acumulado, se queda en este lugar.
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