La publicidad es lo que hace crecer a las empresas. El correo electrónico es uno de los mejores medios para informar a los clientes acerca de sus intereses.
Las cuentas de correo son llaves que dan acceso al contenido de las plataformas y páginas web. Al registrarse, esta información pasa a ser parte de una lista de correos para su posterior uso en email marketing.
El objetivo del mailing efectivo
Esta técnica de marketing es una de las más utilizadas. Las suscripciones generan una base de datos de clientes potenciales. Por ello, la bandeja de entrada puede estar llena de diferentes mensajes promocionales. En muchos casos éstos se seleccionan y se envían a la papelera. Pero esta forma de actuar puede ser un error, ya que en muchos casos el contenido de las ofertas es de gran valor para el destinatario.
Una buena estrategia de mailing tiene presente las necesidades reales de los clientes. Los correos no se envían por simple capricho, y la cantidad no es lo más importante. La finalidad es ofrecer material informativo de calidad, de interés específico y personal. Para mejorar esta estrategia, se dan consejos muy útiles desde el blog oficial de MailRelay, donde explican en una completa guía los pasos para hacer mailing efectivo.
La segmentación
Lo primero de todo es conocer bien a los clientes. A este proceso se le conoce como segmentación, pues el objetivo es desglosar toda la información obtenida sobre los usuarios, y separarla en grupos. Gracias a estos datos se consigue la capacidad de ser específicos y concisos, dos claves para mostrar el producto de forma rápida y directa. De esta forma se logra captar el interés del cliente y evitar ser clasificados como correo basura.
Si el correo enviado es abierto por el destinatario, se produce una interacción. Este es uno de los avances más importantes en la estrategia de mailing. Esta relación debe ser afianzada por un envío frecuente, y controlado, de mensajes con contenido útil. De esta forma se consigue un cliente potencial.
Cuando hay un listado de envío
Si se posee un listado con cuentas ISP (Gmail, Hotmail, Yahoo, etc.), debido al registro de usuarios en la web u otras opciones, debemos tener en cuenta los siguientes datos para hacer un buen uso de ellos:
Debemos conocer las normas de uso sobre el envío masivo de correo. Los administradores, las ISP mencionadas llevan un registro exhaustivo de la información compartida. Controlan la cantidad de envíos y la clasificación de los mismos. Por ello, si como resultado los correos son rebotados o movidos a la papelera, podemos ser penalizados por una mala gestión del mailing. La penalización implica que las ISP puedan clasificar el correo como SPAM automáticamente.
Para evitar estas penalizaciones debemos seguir unos sencillos pasos. En primer lugar, debemos hacer pruebas de envío. De esta forma se detectan correos rebotados o Spamtraps, y cuando demos con ellos debemos eliminarlos de la lista.
Si creemos tener un listado saneado de cuentas inactivas y tramposas, lo siguiente es configurar el caudal de envío. Aunque se puede enviar todo el correo de una sola vez, es una opción poco recomendable. Puede que sin ser conscientes de ello tengamos muchos correos rebotados, o calificados como Spam, en un mismo momento, lo que se traduce en una seria penalización. Por ello, lo más prudente es enviar los correos por grupos, en pequeñas cantidades, y con una cadencia suficiente de tiempo entre ellos. De esta manera se reducen significativamente las posibilidades de recibir penalizaciones.
Cuando no hay un listado de envío
Empezar de cero es una buena opción para configurar estrategias mailing efectivas. Desde los inicios se pueden asegurar bases de datos de clientes potenciales. Estas bases son las mejores para conseguir una buena interacción.
Lo único que se necesita para conseguir un listado de mailing es: un formulario. Estos formularios pueden ser de dos tipos: simples o dobles.
Los formularios simples no dan opción a rechazar, o aceptar, correo informativo. Sin embargo los dobles son aquellos que dejan a elección del cliente la posibilidad de recibir correo informativo/promocional. Esta segunda opción es la mejor si estamos empezando a formar una base de datos. Pues es la forma de evitar penalizaciones en la estrategia de mailing. Cuando un cliente acepta libremente la publicidad, significa que tiene interés en ella y por tanto los datos que aporte serán reales. Esta garantía asegura una menor cifra de rebote en los mensajes, o ser calificado como Spam.
Una estrategia de mailing efectiva garantiza una buena relación con el cliente y un aumento en las ventas.