Estrategias para combatir el estrés diario

El ritmo de vida actual conlleva la exposición a múltiples estresores lo que implica vivir en un estado de permanente tensión que lleva a nuestro organismo a responder de forma constante a  una serie de amenazas subjetivas.

La acumulacioón de tareas es una fuente importante de estrés

En nuestro día a día se dan multitud de situaciones con un alto potencial estresante. Tensiones con el jefe o compañeros de trabajo, dificultad para atender varios proyectos a la vez, llegar a tiempo a recoger a los niños, atascos, retrasos en los medios de transporte urbanos, problemas económicos, miedo a perder el empleo, sobrecarga laboral,… A estas situaciones ya clásicas en nuestra jornada hay que añadir el estrés producido por la tecnología –tecnoestrés- llamadas de teléfono, mensajes de whatsapp, correos electrónicos pendientes, actualizaciones en las redes sociales,…

El estrés pone en marcha una serie de mecanismos bioquímicos que nos ayudan a obtener la energía necesaria para adaptarnos a situaciones que requieren un sobreesfuerzo. Sin embargo, nuestro organismo no está preparado para permanecer en el estado de alerta constante que exige el día a día de la vida moderna, lo que nos lleva a enfermar.

Recientemente, científicos de la Universidad de Stanford han publicado los resultados de un estudio cuya conclusión es que el estrés laboral tiene unas consecuencias tan dañinas como ser fumador pasivo.

¿Cómo surge el estrés?

Los efectos del estrés sobre nuestro organismo dependen de nuestra forma de afrontarlo que a su vez depende de la valoración subjetiva que hagamos de la situación en mayor medida que las características objetivas de la propia situación.

El estrés surge a partir de la interpretación subjetiva de la situación:

• Interpretar lo que ocurre como una amenaza

Voy a suspender el examen y esto confirmará lo torpe que soy y lo incapaz que soy de obtener resultados positivos.

• Considerar que no tenemos los medios suficientes para afrontar la situación

Me queda poco tiempo y no me va a dar tiempo, además tengo mala memoria y necesito un tiempo extra para preparar el examen.

• Percibir que la situación escapa a nuestro control

Por mucho que prepare el examen aprobar o no dependerá de que el profesor ponga un examen normal o vaya a pillar.

Metro de Madrid en hora punta

Además de los tres elementos anteriores existen situaciones con alto potencial para provocar estrés como el ruido del tráfico, vivir en una zona con frecuentes ruidos nocturnos, el hacinamiento (por ejemplo en el metro y autobús urbano), no encontrar trabajo,…

Otras situaciones más cotidianas como perder las llaves, olvidar una cita, romperse un tacón, no saber que ropa ponerse por las mañanas,… a pesar de tener una menor importancia tienen un importante efecto acumulativo que finalmente desencadena una respuesta de estrés.

¿Qué ocurre cuando estamos sometidos a estrés constante?

Cuando el estrés es contante es habitual que aparezcan contracturas musculares y dolores de espalda, alteraciones de la digestión, irritabilidad y ansiedad.

Si el estrés se mantiene de forma prolongada se pueden producir diversos problemas de salud como hipertensión, cefaleas, problemas gástricos (son habituales las úlceras), problemas musculares, disfunciones renales, cáncer, problemas para dormir y alteraciones del sistema inmunológico y del sistema endocrino haciéndonos más vulnerables a las enfermedades infecciosas.

¿Cómo combatir el estrés diario?

Mis consejos para afrontar y combatir el estrés diario son:

• Desarrollar una afición

Nos ayuda a crear un mundo alternativo que interrumpe la atención sobre las preocupaciones. Cuanto más distinta sea de nuestro mundo laboral, más eficaz será.

• Tomar decisiones adecuadas

Nos ayudará a determinar a qué objetivos destinar nuestra energía evitando perder tiempo y recursos en actividades poco importantes o innecesarias y concentrándolos en aquellas realmente importantes. Más información aquí.

• Tomar las riendas de nuestra vida

Uno de los factores que mayor estrés provocan es la percepción de no tener el control de nuestra propia vida. Un buen punto de partida es establecer rutinas que aumentarán nuestra sensación de control

• Practicar deporte de forma habitual

Cualquier actividad física ayuda a reducir el estrés al contribuir a liberar la energía acumulada y la tensión muscular a la vez que aumenta la producción de endorfinas que generan sensación de bienestar

• Relajación

Ayuda a liberar la tensión muscular, reduce el ritmo cardiaco y modifica el patrón de respiración ayudando a reducir los niveles de estrés. Aprende a relajarte aquí.

• Higiene del sueño

Mediante la higiene del sueño se busca disminuir las conductas que pueden interferir en el sueño y fomentar hábitos que lo faciliten. Más información aquí.

Además de los consejos anteriores, como ayuda para combatir el estrés diario de forma eficaz podemos utilizar la pasiflora.

¿Qué es la pasiflora?

La pasiflora es una planta originaria de América con propiedades ansiolíticas (reduce la ansiedad) e hipnosedantes (relaja y ayuda a conciliar el sueño) que ya utilizaban los Aztecas por su efecto tranquilizante y sedante.

Es un ansiolítico ligero que no produce dependencia ni efectos secundarios y está especialmente indicado para personas que sufren tensiones diarias y/o presentan dificultades con el sueño, bien porque les cuesta conciliar el sueño o porque este es irregular dando como resultado una falta de descanso nocturno. La pasiflora provoca un sueño semejante al fisiológico y un despertar rápido, completo y sin obnubilación.

Envase y cápsulas de pasiflora de laboratorios Arkopharma

Una forma fácil y cómoda de tomar pasiflora es utilizar cápsulas como las que nos ofrece Arkopharma. Para más información visita la web de Arkocápsulas.

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