Estaba leyendo que el estrés es el mayor causante de quitarnos la felicidad.
Según el estudio las mayores causas de estrés son el no dejar espacio. Por ejemplo mantener un presupuesto muy apretado, no dejar suficiente tiempo para citas y proyectos, temor a llegar tarde porque no se sale de la casa a tiempo etc.
Como cristianos estamos llamados a descansar en el Señor, pero el llamado no es facil porque aunque oramos por las cosas en realidad no las dejamos a Dios, queremos tener control. El control no existe, el encomendarle nuestras cosas a Dios y tomar precauciones según aprendemos en la vida es más seguro que el creer que al preocuparnos nos estamos ayudando.
Algunas cosas son de sentido común, como el manejar o administra el espacio, tiempo y dinero que tenemos de forma prudente. Si podemos bajar nuestro estrés haciendo esto pues enhorabuena porque es facil. El preocuparnos no arregla nada. Preocuparse es una forma de estresase.
La Biblia dice Mateo 6:34 Así que, no os afanéis por el día de mañana, porque el día de mañana traerá su afán. Basta a cada día su propio mal.
Con un poquito de esfuerzo podemos disminuir el afán dejando suficiente tiempo y dinero para lo que necesitamos. Hay quienes no pueden hacerlo pero la mayoría podemos, algunas veces no podremos pero casi siempre será posible.