La Colectiva ILE, un grupo activista en San Luis Potosí, ha publicado los resultados de un estudio enfocado en las actitudes de las estudiantes universitarias hacia el derecho a la interrupción legal y voluntaria del embarazo (ILE). Según el estudio, una abrumadora mayoría de las encuestadas, más del 80%, afirmó que no votarían por candidaturas que se opongan a este derecho. Este dato subraya la importancia que el tema tiene para los partidos políticos en la región, especialmente considerando que históricamente han evitado apoyar los derechos reproductivos por temor a perder votantes.
El estudio, realizado entre las alumnas de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP), mostró que 9 de cada 10 jóvenes se posicionan a favor de la ILE. Además, casi el 100% de las encuestadas opinó que las mujeres que han buscado decidir sobre su cuerpo han enfrentado discriminación, principalmente de grupos religiosos y adultos mayores. Aproximadamente el 45% de las mujeres conoce al menos a una persona que ha recurrido a un aborto.
Un dato significativo del estudio es que 8 de cada 10 mujeres no apoyarían a un candidato que esté en contra de la ILE. Este resultado resalta la creciente relevancia del tema en las decisiones electorales de la población joven y educada. Además, el 65% cree que el Congreso del Estado no ha respetado los derechos reproductivos de las mujeres, indicando una desconexión entre las políticas actuales y las demandas de la población.
La Colectiva ILE ha anunciado que enviará estos resultados a todos los candidatos a diputaciones locales para instarlos a pronunciarse sobre el tema. El grupo también ha invitado a los medios de comunicación a cuestionar directamente a las candidatas y candidatos sobre sus posturas y propuestas para erradicar la violencia sistemática hacia las mujeres.
Con estos resultados, la Colectiva ILE hace un llamado a todas las mujeres y personas con capacidad de gestar en San Luis Potosí a conocer sus derechos reproductivos y a no temer alzar la voz para ejercerlos. La lucha por la despenalización de la interrupción voluntaria del embarazo continúa, con un impulso renovado por el apoyo evidente de la comunidad universitaria.