Revista Humor
Voy con un par de estudios de esos que me gustan a mí, no, no estoy siendo irónica, me gustan. Ahora veréis por qué.
El primero, llamado ‘La exactitud en la escritura a mano como relación en la inteligencia escolar y el sexo’ -se podían cortar un poquito con los títulos, que son eternos, pero eso es otro tema-, analiza la caligrafía de la gente y determina que los que tienen (tenemos) una letra fea, somos inteligentes. Vamos por partes, ¿quién tiene normalmente una escritura imposible de descifrar? Los médicos. ¿Quién más? Mi compañero de colegio Julio, sólo yo podía leerla, lo curioso es que luego no era el que mejor notas sacaba, yo creo que se hacía el tonto, pero en serio, lo de mi compi era digno de estudio para él solito. (Julio, si me lees, espero que ahora seas un poco más claro y teailofyu, yunou).
¿Alguien más? Sí, yo. En la facultad la gente no me pedía los apuntes porque eran casi rayas, no estoy exagerando, preguntad. Hasta que no los pasaba a limpio muchas veces no podían leerlos y aún así, me solían preguntar "Pilar, ¿qué pone aquí?" y yo decía "Esternocleidomastoideo, está clarísimo". Bueno vale, ponía algo más sencillo, que yo no he estudiado medicina.
Y por si no os fíais de ese estudio, el científico Howard Gardner, Premio Príncipe de Asturias de Ciencias Sociales 2011, y aquí no se dan los premios por rellenar, decía que una persona con agilidad mental tenderá a tener una escritura más rápida y con abreviaturas. En mi clase éramos varias las que nos inventábamos las abreviaturas solamente para poder tomar apuntes más rápidos, teníais que ver a algunos de nuestros profesores, iban que volaban contando las cosas.
Claro, que a lo mejor entonces no es que yo sea lista sino que tenía que tomar tan rápido los apuntes que escribía como podía, todo puede ser. Peeeeeeeeeero, voy a añadir un pero, traigo otro estudio relacionado con la inteligencia, a lo mejor si sumo los dos, sí que soy inteligente.
Los psicólogos de la Marist College y la Massachusetts College of Liberal Arts han llegado a la conclusión de algo muy importante. Quien más tacos dice, más inteligente es. Porque eso demuestra que tienes una capacidad lingüística mayor y un vocabulario superior -de calidad-.
Para demostrar esto hicieron la prueba con más de 100 personas de diferentes edades y los que más insultos conocían, tuvieron mejores resultados en otras pruebas.
El español es muy rico en insultos, pero lo que no tengo claro es si suman los tacos en otros idiomas, porque si es así, juego con ventaja y a lo mejor no soy la más lista pero sí la que puede insultar mejor, pensadlo. Estudiar idiomas da mucho juego, especialmente para aprender lo que no debes, las palabras malsonantes.
A mí lo único que me queda claro después de ver estos dos estudios es que soy supermegahiperlista... tanto que soy muy tonta y no me había dado cuenta antes. Menos mal que siempre me queda maldecir por lo bajini, jod*r.