Me ha salvado, sí, puedo decirlo de manera rotunda y con la boca llena. La amistad es un bien que hay que cuidar y cultivar, que no se gana así porque sí, pero que te devuelve con creces todo lo que has sembrado. Así lo siento y así lo digo.
Hay momentos en los que la amistad me ha sorprendido, no era consciente en ocasiones de haber dado tanto para recibir todo lo que he recibido de mis amigos. Sin duda este último año ha sido de los más duros para mí a nivel personal y vuelvo a repetir que la amistad es lo que me ha mantenido a flote y lo que me ha hecho salir del fondo del pozo en el que me encontraba. Cuando ya no tenía fuerzas para continuar ellos han tirado por mis brazos, por mi cuerpo, por mi mente y por mi corazón para hacerme sentir que no estaba sola y que no me iban a dejar caer.
Existen muchos tipos de amigos, los hay a los que se lo puedes contar todo, los hay a los que ves menos de lo que te gustaría pero que, cuando lo haces, sientes como si el tiempo no hubiera pasado, los hay más divertidos, más realistas, más soñadores… al fin y al cabo todos somos personas individuales con nuestras características propias e intrínsecas. No obstante, a todos los quieres y los aceptas, con sus virtudes y sus defectos, porque también se trata de eso, de aceptarlos tal y como ellos te aceptan a ti.
No existe suficiente espacio para describir lo importante que son para mí y lo feliz que me siento al tenerlos. Los amigos se eligen, no son como la familia, la familia te toca y es la que es… pero para mí, los amigos se han convertido también en mi familia elegida a la que adoro.
Esta es una entrada que tenía pendiente para todos ellos y que por un motivo o por otro he ido posponiendo, pero hace unas semanas tuve un percance que hizo que, de nuevo, me diera cuenta de la buena gente que tengo a mi alrededor y de lo afortunada que soy. Siempre que los necesito están ahí y por eso tienen mi eterno agradecimiento.
No necesito nombrarlos, ellos saben quienes son y solo espero estar a la altura siempre que me necesiten como ellos lo han estado conmigo.