Revista Opinión
La economía mundial ha entrado en una nueva zona de peligro y así lo indica la Comisión Europea en un informe divulgado ayer, que prevé un retorno de Europa a la recesión el próximo año. "El crecimiento se ha detenido en Europa y podríamos entrar en una nueva fase de recesión", dijo Olli Rehn, comisario europeo de Asuntos Monetarios, en el sombrío informe sobre las previsiones de otoño de la CE.
La economía mundial ingresó nuevamente en una zona de peligro y no se puede descartar una recesión profunda y prolongada, sumada a nuevas turbulencias en los mercados financieros. La Comisión Europea bajó al 0,5% la proyección de crecimiento en la eurozona para el 2012, desde el 1,8 por ciento estimado hace seis meses. También revisó a la baja sus previsiones para 2013, a 1,3% desde el 1.8% de la revisión pasada.
Se estima que en la Unión Europea, integrada por 27 países, el crecimiento sólo retornará en 2013, y con un ritmo de apenas 1,5%. Hace poco más de un mes, a mediados de septiembre, Olli Rehn había pronosticado una desaceleración del crecimiento, pero no una recesión en Europa. Esto demuestra que la situación se ha agravado más de lo previsto ante el lento reaccionar de las autoridades europeas, que siempre han ido detrás de los acontecimientos en relación a la crisis.
En Italia, la tercera economía de la eurozona y la más amenazada por un contagio de Grecia, la CE previó un estancamiento en 2012 pero un déficit inferior a 3 por ciento del producto interno bruto (PIB), tope tolerado por el pacto de estabilidad de la Unión Europea. Bruselas espera que el déficit italiano baje a 3,6 por ciento este año; a 2,9 en 2012, y a 2.3 por ciento en 2013. Sin embargo, estas previsiones no toman en cuenta la reciente alza de las tasas de los intereses de la deuda italiana, que han alcanzado el 7%, y que si persisten, aumentarían fuertemente los costos financieros del país y echar por tierra la recuperación con el incremento del déficit.
De acuerdo al informe, Grecia se mantendrá en recesión el año próximo con un retroceso del PIB de 2,8 por ciento. En previsiones anteriores los europeos habían vaticinado para Grecia un crecimiento de 1,1 por ciento en 2012. Bruselas dice que Grecia recién registrará un leve retorno al crecimiento en 2013, de 0,7 por ciento. De confirmarse estos pronósticos, el país heleno completará tres años consecutivos de profundo estancamiento económico.
El PIB de España registrará un leve crecimiento de 0,7 por ciento en 2011 y 2012, indicó el informe; antes había calculado entre 0,8 y 1,5 por ciento, respectivamente. El informe del ejecutivo comunitario vaticinó que España tampoco podrá cumplir con la meta de reducir el déficit público a 6 por ciento del PIB este año. Este freno económico general golpeará en 2012 a las grandes economías de la eurozona, integrada por los 17 países que adoptaron al euro como moneda. El crecimiento en Alemania, considerada la locomotora de la economía de la unión monetaria, se desacelerará desde 2,9 por ciento este año hasta 0,8 por ciento, y Francia, de 1,6 a 0,6 por ciento. La CE advirtió que este panorama sombrío empeorará aún más si la crisis de deuda prosigue en Europa y si se agrava la situación de los bancos, que necesitarán mayor inyección de capital.
La reanudación del crecimiento y de la creación de empleo dependerá del restablecimiento de la confianza en el sistema financiero, y de la aceleración en la puesta en marcha de las reformas exigidas por Bruselas. El Banco Central Europeo adelantó que es muy probable que las previsiones y proyecciones para el crecimiento medio del PIB real en 2012 continúen revisándose significativamente a la baja.Una mirada no convencional al neoliberalismo y la globalización
La economía mundial ingresó nuevamente en una zona de peligro y no se puede descartar una recesión profunda y prolongada, sumada a nuevas turbulencias en los mercados financieros. La Comisión Europea bajó al 0,5% la proyección de crecimiento en la eurozona para el 2012, desde el 1,8 por ciento estimado hace seis meses. También revisó a la baja sus previsiones para 2013, a 1,3% desde el 1.8% de la revisión pasada.
Se estima que en la Unión Europea, integrada por 27 países, el crecimiento sólo retornará en 2013, y con un ritmo de apenas 1,5%. Hace poco más de un mes, a mediados de septiembre, Olli Rehn había pronosticado una desaceleración del crecimiento, pero no una recesión en Europa. Esto demuestra que la situación se ha agravado más de lo previsto ante el lento reaccionar de las autoridades europeas, que siempre han ido detrás de los acontecimientos en relación a la crisis.
En Italia, la tercera economía de la eurozona y la más amenazada por un contagio de Grecia, la CE previó un estancamiento en 2012 pero un déficit inferior a 3 por ciento del producto interno bruto (PIB), tope tolerado por el pacto de estabilidad de la Unión Europea. Bruselas espera que el déficit italiano baje a 3,6 por ciento este año; a 2,9 en 2012, y a 2.3 por ciento en 2013. Sin embargo, estas previsiones no toman en cuenta la reciente alza de las tasas de los intereses de la deuda italiana, que han alcanzado el 7%, y que si persisten, aumentarían fuertemente los costos financieros del país y echar por tierra la recuperación con el incremento del déficit.
De acuerdo al informe, Grecia se mantendrá en recesión el año próximo con un retroceso del PIB de 2,8 por ciento. En previsiones anteriores los europeos habían vaticinado para Grecia un crecimiento de 1,1 por ciento en 2012. Bruselas dice que Grecia recién registrará un leve retorno al crecimiento en 2013, de 0,7 por ciento. De confirmarse estos pronósticos, el país heleno completará tres años consecutivos de profundo estancamiento económico.
El PIB de España registrará un leve crecimiento de 0,7 por ciento en 2011 y 2012, indicó el informe; antes había calculado entre 0,8 y 1,5 por ciento, respectivamente. El informe del ejecutivo comunitario vaticinó que España tampoco podrá cumplir con la meta de reducir el déficit público a 6 por ciento del PIB este año. Este freno económico general golpeará en 2012 a las grandes economías de la eurozona, integrada por los 17 países que adoptaron al euro como moneda. El crecimiento en Alemania, considerada la locomotora de la economía de la unión monetaria, se desacelerará desde 2,9 por ciento este año hasta 0,8 por ciento, y Francia, de 1,6 a 0,6 por ciento. La CE advirtió que este panorama sombrío empeorará aún más si la crisis de deuda prosigue en Europa y si se agrava la situación de los bancos, que necesitarán mayor inyección de capital.
La reanudación del crecimiento y de la creación de empleo dependerá del restablecimiento de la confianza en el sistema financiero, y de la aceleración en la puesta en marcha de las reformas exigidas por Bruselas. El Banco Central Europeo adelantó que es muy probable que las previsiones y proyecciones para el crecimiento medio del PIB real en 2012 continúen revisándose significativamente a la baja.Una mirada no convencional al neoliberalismo y la globalización