Leo un artículo de Xavier Ferràs en el suplemento Dinero de La Vanguardia en el que resalta la importancia global de las "siete magníficas", las 7 compañías tecnológicas norteamericanas que actualmente dominan el mundo, y cuyo valor bursátil acumulado equivale al PIB global de la Unión Europea (Ferràs dixit).
Hacia el final del artículo se lamenta el autor de que la UE debería hacer algo si no quiere acabar siendo una colonia tecnológica y económica, y en definitiva política, de Estados Unidos. Y en consecuencia encontrarse en medio de la nueva guerra fría China-EEUU, que veremos desarrollarse más y más en las próximas décadas.
La conclusión que saco de todo ello, y que el autor no menciona, es una muy clara: o avanzamos en más Unión Europea en todos los sentidos, o dejaremos de contar en un mundo polarizado. De nada sirve poner parches. El único camino en más unión política, con todas sus consecuencias.
El gran problema es que llevamos años hablando de ello y no avanzamos. Al contrario, retrocedemos. Y los vientos políticos de derecha y ultraderecha que soplan actualmente apuntan a seguir retrocediendo.
En los próximos 10 años nos jugamos ser nosotros mismos o pasar a ser un apéndice de Estados Unidos (y esperamos que no de China). No tenemos, en mi opinión, más margen.
La verdad es que no soy optimista, pero espero que las nuevas generaciones (las generaciones Erasmus) vean la luz y lo hagan posible antes de que sea demasiado tarde.