Evaluación de daños y recuperación tras incendio en la ciénega de «Cabezas» en Tamasopo

El Poder Ejecutivo del Estado de San Luis Potosí, a través de las Secretarías de Ecología y Gestión Ambiental (Segam) y de Desarrollo Agropecuario y Recursos Hidráulicos (Sedarh), ha tomado cartas en el asunto tras el incendio forestal que devastó aproximadamente mil hectáreas de la ciénega de «Cabezas» o Tampasquín en Tamasopo, el pasado 8 de marzo. La iniciativa busca analizar el impacto agrícola, los daños causados y el tiempo necesario para la recuperación del ecosistema afectado.

El fuego, que se inició en la mañana de dicho día, se extendió desde los cañaverales hasta los pastos y la vegetación seca del humedal, afectando áreas vitales para la biodiversidad local, incluyendo los ejidos Cabezas, Tamasopo, Santa María Tampalatín y 20 de noviembre. La Dirección Forestal y Vida Silvestre ha estado al frente de la evaluación del siniestro, que también impactó parte del «Sitio Ramsar», un humedal de importancia internacional que sirve como hábitat y área de anidación para especies de aves residentes y migratorias, como la grulla canadiense, garzas blancas y patos.

El daño al «Sitio Ramsar» ha movilizado tanto a investigadores de ecología como a la comunidad local, quienes han observado los efectos devastadores del incendio. En respuesta, técnicos de la Sedarh han comenzado a delinear el área afectada, mientras Segam ha enviado especialistas para realizar un muestreo detallado de los daños al ecosistema. A una semana del incidente, aún se reportaba fuego activo en troncos y maleza, lo que subraya la necesidad de una intervención rápida y eficaz para estimar los daños y planificar los esfuerzos de recuperación.

La gestión del desastre y los esfuerzos de recuperación subrayan el compromiso del estado con la protección del medio ambiente y la biodiversidad. Este incidente resalta la importancia de la conservación de los humedales y la necesidad de estrategias efectivas para prevenir y responder a incendios forestales, asegurando la preservación de estos ecosistemas críticos para el equilibrio ambiental y la biodiversidad.