Vosotras, sí, vosotras que tenéis entre 25 y 30 años… ¿Cuidáis vuestra piel frente al envejecimiento? “¡Si aún somos muy jóvenes!”, os diréis. ¡Y tenéis razón, pero piel sólo hay una! Y seguro que sabéis que el paso del tiempo no es el único enemigo de nuestro cutis: hay muchos hábitos, la mayoría evitables, que pueden potenciar que nuestras líneas de expresión se acentúen más y antes de tiempo.
A diario realizamos gestos y acciones que pueden causar el envejecimiento prematuro de la piel. Algunos son difíciles de evitar, pero otros no tanto. De todos modos, la prevención es la clave: a partir de los 25 años es la etapa idónea para comenzar a utilizar productos preventivos contra el paso del tiempo. ¡Toma nota!
Fumar
Ay, los cigarros… ¡Fumar es muy malo para tu organismo y para tu piel! El tabaco acelera el envejecimiento de la piel y, además, el gesto mismo de fumar puede potenciar que, con el tiempo, te salgan pequeñas arrugas alrededor de los labios. ¡Sabemos que es difícil, pero trata de dejarlo
No descansar adecuadamente
Somos conscientes de que eres una mujer ocupada. Trabajas, concilias tu vida laboral con tu vida personal, llegas a casa por la noche y te apetece ponerte un capítulo en Netflix… y otro más… y otro más… ¡Y acabas trasnochando todos los días! A veces es complicado cuadrar los horarios para poder irte a dormir temprano, pero has de intentarlo, ¡tu piel lo necesita! Por la noche las células aprovechan para regenerarse, y un descanso escaso facilita la mala apariencia de la piel, así como el envejecimiento prematuro. ¡No te la juegues y a dormir!
No eliminar el maquillaje
¡Qué pereza da a veces desmaquillarse! Pero todas sabemos que es un paso FUNDAMENTAL para no llamar a la puerta del envejecimiento. A lo largo del día, además del maquillaje, nuestra piel acumula otros agentes externos perjudiciales que han de ser limpiados para favorecer la salud de nuestra piel, evitar que nuestros poros se taponen y facilitar la regeneración celular, así que ya sabes.
No protegerte del sol
Aunque no sea verano, ¡el sol sale todos los días! Protege tu piel adecuadamente frente a los rayos solares: el Astro Rey es el archienemigo de nuestro cutis, ¡gánale la batalla!
Quitarte granitos
Eliminar tus imperfecciones con las manos es altamente perjudicial. No sólo porque puedes causarte heridas o infectarte si no te has lavado las manos antes, sino porque puedes favorecer la creación de arrugas. Trata de dejar que tus granitos desaparezcan solos o utiliza los productos adecuados para secarlos y decirles adiós para siempre.
Mascar chicle
¿Nunca lo habías pensado? Pues sí: mascar chicle habitualmente, además de no ser bueno para tu mandíbula, puede originar arrugas características. Esta sí que es fácil de evitar, ¿verdad?
Dieta sin agua
Lo que va por dentro se refleja por fuera. La hidratación de la piel es fundamental para retrasar los signos del envejecimiento, ¡y conviene que lo hagas también desde el interior! Come alimentos que contengan agua y trata de beber al menos dos litros al día.