Excelente acogida en la ruta ornitológica 'As aves do inverno' por el estuario del Miño

Ni la alerta naranja por temporal marítimo, ni los fuertes vientos que se esperaban para la jornada del domingo 18 consiguieron desanimar a los 22 participantes en la ruta ornitológica 'As aves do inverno', organizada conjuntamente por Biophilia Educación Ambiental, asociación A Jalleira y El Naturalista Cojo. Nada pudo frenar el entusiasmo de los asistentes, llegados desde diferentes puntos de la provincia de Pontevedra, en un esfuerzo que es de agradecer teniendo en cuenta las desfavorables previsiones meteorológicas. No era el mejor día para la observación de aves... Ni mucho menos el más cómodo. Tampoco la marea era la propicia, con un río tan impetuoso y temperamental como el océano que le aguardaba aguas abajo. Teníamos todo en contra... Sin embargo, teníamos la esperanza de que la potente borrasca situada frente a las costas gallegas trajera consigo alguna sorpresa ornitológica. No sería nada extraño... A pesar de los pesares, la respuesta fue contundente y muy positiva. 

A pesar del frío, no faltaron las risas y el buen ambiente

Hechas las presentaciones y los trámites pertinentes, nos pusimos en marcha, partiendo desde la zona de aparcamiento de A Xunqueira, muy próxima al observatorio de aves. Había que entrar en calor... Pronto pudimos avistar a las primeras protagonistas, esas que nunca faltan: las garzas y garcetas. En concreto, un ejemplar de garceta grande, que destacaba entre el verde de la vegetación marismeña. A su lado, la grisácea garza real nos mostró una interesante comparativa entre ambas especies. 
Faltaba el águila pescadora, a la que suponíamos posada en alguna de las estacas de madera dispuestas al borde de la isla Canosa. A cambio, un animado grupo de 13 avefrías hizo las delicias de todos los asistentes, un bonito avistamiento que dio pie a hablar del drástico declive experimentado por esta especie en los últimos años, hasta el punto de haber desaparecido casi por completo. En la actualidad, ver más de cinco individuos juntos es casi un milagro. 

Algunos de los participantes en plena observación

En realidad, esas 13 avefrías formarían parte de un bando más amplio de 46 ejemplares, observado unos días antes por este que escribe. Un registro inusual fruto seguramente de la inestabilidad meteorológica. La emoción fue in crescendo con el registro de dos aguiluchos laguneros, de los cuales uno resultó ser '6A', bautizada con el nombre de Lucha, una hembra marcada en Norfolk (Inglaterra) invernante en el estuario del Miño desde 2017. 
Pero no solo en el agua estaba puesta nuestra atención... En tierra firme, bisbitas, tarabillas, buitrones y mirlos nos mantuvieron entretenidos durante unos instantes. Así acompañados, fuimos acercándonos poco a poco a Forno do Duque, donde se concentraba el grueso de aves acuáticas. Destacaban por cantidad las cercetas ―los patos más pequeños de la Península Ibérica― que se contaban por decenas. Entre ellos, mucho más grandes, nadaban los azulones. Lamentablemente, el cielo plomizo y el contraluz de la mañana no nos dejaron apreciar con claridad sus llamativos colores. 

Archibebes claros y correlimos tridáctilos fueron dos de las especies observadas

Posadas encima de los islotes, frente al observatorio ornitológico, un interesante catálogo de limícolas dormitaban con la postura típica, cabeza dirigida hacia atrás y pico escondido entre el plumaje. No fue nada fácil identificar a los chorlitos, zarapitos, archibebes y correlimos que se apretujaban en los pocos metros cuadrados de tierra disponible. 
Tras varios minutos consultando las guías e intentando resolver el mayor número posible de dudas, proseguimos la caminata hacia la desembocadura del Miño, en Camposancos, atravesando el barrio de A Pasaxe. Aquí nos sorprendió el vuelo de una solitaria garcilla bueyera, imagen que contrastaba con la de una enorme bandada de casi medio centenar de individuos citada el 12 de diciembre en las marismas de Salcidos. 

Marismas de Salcidos, en el estuario del río Miño

Las rachas de viento cada vez mas intensas anunciaban inequívocamente que nos acercábamos a una zona más expuesta a las inclemencias del tiempo. Al límite mismo entre la abrigada marisma y las desprotegidas dunas, a merced de los temporales. Eran los últimos metros antes de llegar a la playa de A Armona, el final de nuestro recorrido. Allí teníamos pensado hacer una breve pausa para comer, mientras esperaríamos a que la bajamar posibilitara el regreso de las aves que se alimentan en el lodo: las limícolas. 
Con lo que no contábamos era con las fuertes ráfagas de aire, que hicieron inviable quedarse allí mucho tiempo. Los pocos que aguantamos el tiempo suficiente, tuvimos la enorme fortuna de contemplar a corta distancia el lance de un águila pescadora, que tras lograr capturar a su presa, se vio obligada a soltarla ante el acoso de una gaviota. La reina de la marisma había aparecido en el último momento para dejarnos el mejor sabor de boca. Una escena propia del mejor documental de naturaleza para cerrar una jornada inolvidable. 

Algunas de las aves observadas en la playa de A Armona

Echamos un último vistazo a la playa antes de dirigirnos a una cafetería para tomar algo caliente. Aprovechamos también para realizar el sorteo de las tres guías cedidas por ANABAM, que finalmente cayeron en manos de Natalia, Luís y Ánxela. Como muestra de agradecimiento, hemos donado 1€ por participante al proyecto RENABAR, mediante el cual esta asociación pretende adquirir parcelas en el bosque de ribera de Salcidos para garantizar su conservación. Un objetivo al que hemos querido contribuir con la realización de esta actividad.
A continuación se muestra una relación tanto de las especies observadas como del número aproximado de ejemplares por especie (entre paréntesis): Águila pescadora (2), Avefría europea (13), Archibebe claro (43), Andarríos chico (3), Cistícola buitrón, Cerceta común (150), Tarabilla común (1), Corneja común (8), Cormorán grande (14), Estornino negro, Ostrero euroasiatico (1), Gaviota reidora (2), Gaviota patiamarilla (6), Garcilla bueyera (2), Garza real (2), Garceta común (2), Garceta grande (1), Ánade azulón (20), Lavandera blanca (2), Zarapito real, Zarapito trinador (2), Zampullín común (4), Mirlo común (1), Ratonero común (1), Ánade friso (8), Bisbita pratense, Chorlito gris (20), Chorlitejo grande (1), Correlimos tridáctilo, Colirrojo tizón (2), Aguilucho lagunero occidental (2).