Ya sabéis que la exfoliación facial es para mí todo un imprescindible y os recuerdo cada semana que hay que realizarla, sin fallar, pero no suelo hablaros tanto de la exfoliación corporal, algo que también realizo cada semana y que me parece igual de importante que la facial.
La exfoliación corporal elimina las células muertas de la piel de todo el cuerpo, dejando la piel suave y limpia, y favoreciendo la penetración de los tratamientos posteriores que se apliquen en el cuerpo. Por ello, es fundamental realizar una exfoliación corporal 1 ó 2 días a la semana, especialmente si utilizas algún producto reafirmante o anticelulítico, ya que mejora notablemente el efecto de este tratamiento sobre glúteos, muslos, cadera o abdomen.
El último que estoy utilizando es el exfoliante corporal de Somatoline, Scrub Sea Salt, un gel exfoliante que prepara la piel para potenciar la acción de los productos reductores de la marca. Gracias a su exclusiva formulación a base de sales marinas y aceites esenciales hidro-emolientes, acondiciona la piel para recibir de forma más efectiva los tratamientos posteriores.
Ayuda a regenerar y purificar la piel a la vez que exfolia y alisa la epidermis, eliminando las impurezas y células muertas y reduciendo los micro-relieves de la piel hasta un 50%. Además, garantiza un elevado aporte de hidratación a los tejidos cutáneos, favoreciendo la penetración de los tratamientos cosméticos posteriores.
Su utilización es muy sencilla, tan solo hay que aplicarlo en la ducha mediante un masaje con movimientos circulares sobre la piel previamente humedecida y aclarar con agua, evitando el jabón para prolongar los efectos. La sensación es fantástica sobre la piel, que queda especialmente fresca, suave y renovada.
Como complemento, lo utilizo junto al tratamiento Reductor 7 noches ultra intensivo gel fresco, la máxima eficacia reductora de Somatoline Cosmetic, que actúa mientras duermes, ofrece una textura fresca y sedosa de agradable perfume. Su fórmula potenciada y concentrada en activos reductores, aprovecha la especial receptividad de la piel en las horas nocturnas para ejercer su triple acción:
- Lipolítica: favorece la reducción de las acumulaciones de grasa localizada, gracias a la Sphacelaria Scoparia, un extracto de alga marina.
- Drenante: gracias al Sericosido natural (Gingko Biloba), un árbol de hoja caduca del Sur de África, mejora la circulación, evita la hinchazón y drena el exceso de líquidos cutáneos.
- Anti-acumulación: previene la formación de nuevas acumulaciones de grasa localizada.
Su innovadora textura en gel modifica su consistencia durante el masaje, fundiéndose en la piel y ofreciendo una sensación muy agradable, sin producir enrojecimiento. La piel se siente fresca y tersa tras su aplicación. Además, contiene sales marinas que realizan una suave exfoliación, suavizando la piel.
Como veis, se trata de un pack de tratamiento ideal para prepararnos de cara al verano, que dentro de nada nos toca sacar el bikini y así no nos asustamos! 😉
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