Ha llegado el momento de los exfoliantes… (¡por supuesto, naturales!)
Antes del verano es momento para librarse de la capa superficial de la piel que contiene impurezas, células muertas e irregularidades para conseguir una piel uniforme que se broncee adecuadamente. (Y, por supuesto, después del verano, se necesita una exfoliación en profundidad para renovar la piel). Aunque muchas personas se liberan de esas impurezas a lo largo de todo el año utilizando exfoliantes regularmente (mejor exfoliantes naturales), en primavera y en otoño la exfoliación es imprescindible: contribuye a dar vida a la piel, a regenerarla, a dejarla luminosa, radiante y preparada para un bronceado espléndido y perfecto. Espalda, brazos y muslos se benefician especialmente de la exfoliación. Y por supuesto, el rostro, que hay que exfoliar con mayor delicadeza.
¿EXFOLIANTE O PEELING?
Se trata de dos conceptos muy similares que tienen como finalidad eliminar las células muertas de la capa superficial de la piel para encontrar una nueva capa de textura más suave y uniforme. A menudo, las casas comerciales usan los dos conceptos indistintamente, pero la diferencia es que la palabra “Peeling” se reserva para exfoliaciones de mayor intensidad. Un peeling puede llegar a ser profundo si se realiza en un centro especializado, pero eso está reservado a pieles resistentes y a tratamientos clínicos. Lo que solemos hacernos en casa son exfoliaciones que, realizadas repetidamente, dependiendo de la sensibilidad de la piel, van retirando capas y dejando la piel cada vez más rejuvenecida de una manera natural.
¿EXFOLIAR ES BUENO PARA TODAS LAS PIELES?
Todas las pieles pueden someterse a los beneficios de la exfoliación, pero las pieles muy sensibles o reactivas precisan una exfoliación muy delicada y deben ser muy cuidadosas en la elección de los ingredientes y mascarillas.
En todo caso, existe una variedad suficiente de exfoliantes naturales como para poder elegir el que mejor se adapta a tu piel. Por ejemplo, un exfoliante que provoca un efecto “rascado” a base de micro-cristales quizá no sea adecuado para una piel muy reactiva, aunque en la misma persona puede ser un exfoliante ideal en zonas como espalda o piernas. Un exfoliante a base de ácidos de frutas puede ser más o menos suave según su concentración en ácidos, etc.
TIPOS DE EXFOLIANTES NATURALES
Tanto si deseas elaborarlos de forma casera como si decides comprarlos ya preparados, podemos agrupar los exfoliantes naturales en tres categorías según los ingredientes que contienen:
EXFOLIANTES CON EXTRACTOS DE PLANTAS Y SEMILLAS
En casa se puede preparar un buen exfoliante a base de semillas trituradas de frutas, por ejemplo con pepitas de uva. Una vez trituradas, se mezclan con un aceite facial (por ejemplo de almendras o de rosa mosqueta) y se consigue así un buen exfoliante natural para el rostro. Si, en cambio, se prefiere una opción más cómoda, es importante elegir un producto Bio de cosmética ecológica certificada, o bien uno cuya fórmula sea impecable y no contenga química sintética como la mayoría de la cosmética tradicional.
Algunos excelentes ejemplos son:
Naturally Pure Scrub a base de semillas de Rosa Mosqueta mezcladas con cáscara de nuez y otros ingredientes 100% naturales que suavizan el efecto agresivo del peeling. Este peeling de Alqvimia es un exfoliante facial suave, pues su composición está pensada para esta delicada zona.
Gommage White Effect, de Gamarde, es un exfoliante natural que forma parte del tratamiento White Effect, el único tratamiento blanqueador natural a base de arbutina, una planta despigmentante que no tiene los efectos tóxicos de la hidroquinona. El exfoliante de Gamarde contiene Gaulteria Olorosa (precursor del ácido salicílico de efectos exfoliantes) y está pensado para quienes persiguen un efecto de aclarado de la piel e inhibidor de la melatonina. Está certificado Bio.
El Exfoliante de Bambú de Dulkamara, también certificado Bio, está elaborado a base de extracto de medula de bambú triturada. Viene en un tarro con el polvo de bambú que hay que preparar mezclándolo (idealmente) con las Savias de Bambú o bien con una crema hidratante. También está certificado Bio con el sello ecológico CPAE. Aunque hay que prepararlo la preparación es muy sencilla y tiene la ventaja de que es “regulable” según las necesidades: puede utilizarse mayor cantidad de polvo de bambú en la proporción si se desea una exfoliación más profunda, por lo que puede ser usado tanto en el rostro y también como exfoliante corporal.
El exfoliante de Patyka contiene también extracto de bambú triturado además de otras plantas que dejan la piel extraordinariamente nutrida y radiante. Es uno de los tratamietos estrella de esta deliciosa marca francesa de fórmulas, aromas y presentaciones irresistibles. Está cerificado Bio.
EXFOLIANTES CON MICRO-CRISTALES
Estos productos exfolian con el efecto mecánico de “rascar” la capa superficial con irregularidades e imperfecciones y revelar la capa de piel renovada. Este efecto puede conseguirse con arena o sal y ser preparado en casa. Pero uno de los mejores exfoliantes a base de micro-cristales que vienen ya preparados es el de la marca Oskia. Oskia no tiene certificado Bio pero sí un compromiso ecológico muy serio con sus fórmulas, por eso es una marca que nos convence y que incorporamos en nuestra tienda. El Micro-exfoliating Balm de Oskia es un exfoliante facial formidable que también está pensado para el escote y la zona delicada del cuello. Es efectivo y, a la vez, delicado con las pieles más sensibles.
EXFOLIANTES CON ARCILLAS
Las arcillas, especialmente la arcilla verde, son utilizadas desde tiempos inmemoriales para elaborar mascarillas purificantes de la piel. Una arcilla comprada en el herbolario puede servir para preparar una mascarilla sencilla que dejará la piel limpia en profundidad, con un efecto exfoliante que aunque sea superficial es muy agradable. Se trata, además, de productos más económicos si los comparamos con las mascarillas más elaboradas.
Entre estas tenemos la mascarilla de arcilla verde Cattier o la Mascarilla ultrapurificante de Madara, elaborada a base de fango de los bosques y lagos escandinavos. Muy práctica y de precio muy moderado, se llama Detox y se puede encontrar en tamaño normal o tamaño de viaje, en cualquier tienda de cosmética natural que tenga productos de Madara, cosmética Bio de Letonia.
Dr Hauschka, cosmética Bio alemana, también tiene una mascarilla a base de arcillas purificantes que lleva años en el mercado de los productos ecológicos con mucho éxito: Se presenta en polvo y hay que prepararla, y lleva además de arcillas purificantes de alta calidad extractos de capuchina y hamamelis. Ideal para las pieles grasas.
Exfoliante o Peeling?
Siempre se recomienda una vez a la semana o cada diez días hacer una pequeña exfoliación en la piel, para retirar células muertas, ayudar a regenerar la piel y que el producto que nos apliquemos después (Serum, crema, contornos…) se absorba mucho mujer y actúe de mejor manera, pero… ¿qué diferencia hay entre una exfoliación y un peeling?
Pues en pocas palabras, una exfoliación es la eliminación de células muertas de manera superficial, con un producto que mediante suaves movimientos va retirando las células muertas, puede ser:
- Scrub: Contienen pequeñas partículas (hueso triturado de albaricoque, microesferas de polietileno…) que debido al movimiento eliminan las células muertas mediante fricción. Siempre hay que aclararlos con agua.
- Gommage: Es como el scrub, pero el medio en el que viene suele ser una crema algo más pastosa, lo que provoca que al realizar los movimientos se produzca un arrastre con efecto “goma de borrar” Suelen ser sin aclarado.
Ahora bien, un peeling actúa más a fondo que el exfoliante. Elimina las células muertas de la piel y es un tratamiento para marcas de acné, arrugas marcadas, marcas de cicatrices, actúa en el cemento intercelular que une las células epiteliales. Ayuda a dejar una piel mucho más lisa y un poro más imperceptible.