LA HABANA, Cuba. -El acontecer político que vive Cuba en estos momentos es bastante intenso, particularmente en su relación con los Estados Unidos de América. Movimientos políticos, personalidades, académicos y la sociedad en general dentro y fuera de la isla están inmersos en un profundo debate sobre el Embargo financiero, económico y comercial que Estados Unidos ha impuesto sobre la isla desde 1960.
A finales de octubre pasado, la Asamblea General de las Naciones Unidas votó, por vigésimo tercera vez, reclamar el fin de las sanciones norteamericanas hacia Cuba. En un resultado idéntico al obtenido en 2013, una abrumadora mayoría de 188 países votaron en contra del Embargo, 3 se abstuvieron y 2 votaron a favor de mantenerlo (Estados Unidos e Israel).
Esta votación ocurrió en un contexto marcado por los esfuerzos del Gobierno de la isla en elevar su perfil a nivel internacional (garante de las conversaciones de paz en Colombia, organización de cumbre de la CELAC, envío de médicos a trabajar con enfermos de ébola, etc.). Un proceso de especial importancia en este escenario ha sido el restablecimiento de los diálogos de negociaciones con la Unión Europea para la firma de acuerdos bilaterales, y sin dudas, las autoridades contemplan un posible escenario donde existan acercamientos y diálogos directos sobre temas políticos y económicos con la Casa Blanca.
En una decisión sin precedentes, han sido reproducidos en el diario Granma tres editoriales del New York Times (prácticamente íntegros) en el último mes analizando el Embargo y las varias políticas recientemente adoptadas por Cuba. Como colofón, esta semana, el editor de la sección de opinión del diario neoyorquino, Andrew Rosenthal, ha explicado que las recientes editoriales responden a tratar de influenciar a los políticos de Washington a cambiar sus políticas hacia la isla.
En este acalorado marco, CubaNet quiso obtener las opiniones de cubanos diversos radicados fuera de la isla a propósito de este tema.
Arturo López Levy, politólogo cubano de la Universidad de Denver, opina que “cada día el consenso en contra del embargo es más abrumador” tanto a nivel mundial como en los Estados Unidos y afirma que “la oposición al Embargo entre los republicanos ha crecido más rápido en los últimos años”. López- Levy califica el embargo de “inmoral, ilegal y contraproducente” y añade que “no es una política de sanciones a individuos ligados a violaciones de los Derechos Humanos, sino una política de represalia colectiva y resentimiento”.Además, López-Levy reafirmó la necesidad de denunciar el embargo. “Sería muy positivo que los opositores cubanos dediquen esfuerzo y prioridad en sus viajes para acabar con sanciones ilegales e inmorales contra su pueblo. Si eso les trae problemas con el exilio cubano de línea dura, y reducción de los fondos que reciben, pues que así sea. En política hay costos que vale la pena pagar.”
Por otra parte, Karel Becerra, vocero de Cuba Independiente y Democrática (CID), y residente en Argentina, considera que el Embargo es “sobre los hermanos Castro, y no sobre Cuba”. Agregó que “es importante reconocer al Embargo como una política exitosa y posiblemente la más eficaz que ha existido”. Becerra piensa que “el Embargo es un muro de defensa infranqueable que impide la expansión del comunismo a muy bajo costo” y considera “indispensable” mantenerlo.
El debate se refleja también en la blogósfera cubana, espacio de opinión con participación dentro y fuera de la isla que ha devenido foro de pluralidad sobre la actualidad cubana.“No hay Embargo contra Venezuela y vemos como se violan cada día los derechos de los venezolanos. No hay Embargo contra China y millones de chinos viven en un nivel cercano a la esclavitud. No hay ninguna posibilidad de que el levantamiento del Embargo a Cuba garantice el respeto a nuestros derechos.” explica Liu Santiesteban, periodista, bloguera y activista cubana radicada en Nueva York. Santiesteban considera además que “el Embargo es el único gesto internacional de solidaridad con el pueblo cubano” y piensa que “los pocos cambios que están ocurriendo en la isla han sido un logro del Embargo y de la persistencia de la oposición“.
No opina así Jorge Ros, ingeniero y bloguero cubano radicado en La Florida. Ros afirma que el Embargo ha sido “inútil e inoperante y solo le ha dado al Gobierno cubano una justificación para su fracaso económico”. Con respecto a los cambios económicos que están ocurriendo en Cuba, Ros opina que eliminar el Embargo “puede abrir a pequeños productores y pequeñas industrias privadas cubanas un mercado natural que es el sur de la Florida” y piensa que su existencia “crea un estado de acoso que hace difícil lograr que el Gobierno cubano realice concesiones en materia de Derechos Humanos”.
Las diversas opiniones reflejan aún la división entre distintos sectores del exilio cubano. Si bien, de acuerdo a una encuesta realizada a inicios de año por Atlantic Council, la mayoría de americanos y de residentes el La Florida en general piden una normalización de las relaciones entre ambos países, y entre cubanos en la isla y en el exilio, la defensa del embargo por algunos sectores de la población sugiere recordar la necesidad de compensar a aquellos que perdieron sus posesiones a inicios del Gobierno de Fidel Castro.
¿Qué opinas tú?