Uno de los temas favoritos de Para contar en la cena es la Guerra fría. Basándose en el miedo a un conflicto atómico, las dos grandes potencias se enzarzaron en una carrera armamentística y unos protocolos de seguridad que en muchas ocasiones rayaron la paranoia. Ambos bandos construyeron enormes instalaciones militares desde las que poder dirigir a sus ejércitos en caso de que estallase una guerra nuclear. Pero estas instalaciones no son exclusivas de los Estados Unidos o de la extinta Unión Soviética: la gran mayoría de los países de la OTAN cuentan con complejos defensivos desde los que coordinar una "defensa final" en caso de un conflicto a gran escala. España no es menos, y tiene su propia "montaña Yamantau" (enigmática instalación rusa sobre la que hablamos en un post anterior). Hoy os hablamos de uno de los recintos más secretos de nuestro país: El búnker de la Moncloa. El búnker fue terminado a finales de 1991, en plena Guerra del Golfo. Su nombre oficial es CITA -centralización de instalaciones técnicas auxiliares-, y su personal depende del Departamento de Infraestructuras y Seguimiento para Situaciones de Crisis (DISSC por sus siglas), órgano directamente dependiente del Ministerio de Presidencia. El búnker de la Moncloa languidece en la actualidad como una reliquia de la guerra fría. Aunque se mantiene en constante funcionamiento al así exigirlo los protocolos de seguridad de la OTAN, los sucesivos presidentes del gobierno se han desentendido de éste claustrofóbico e incómodo monstruo, y prefieren gestionar las crisis nacionales desde la comodidad de sus despachos. Una de las últimas veces que se utilizó fue durante la nochevieja de 1999. Ante la contingencia de que el efecto 2000 desencadenase un apocalipsis electrónico, el vicepresidente Álvarez Cascos se encerró en el búnker con un gabinete de crisis, dispuestos a lidiar desde allí con el fin del mundo. Por fortuna al final fue una falsa alarma, pero los funcionarios del DISSC continúan en constante alerta velando por nuestra seguridad.
El búnker de la Moncloa debe su existencia al ex presidente del gobierno Felipez González. A raíz del frustrado golpe de estado del 23 de febrero de 1981, ordenó iniciar la construcción de un refugio en el mismísimo subsuelo del Palacio de la Moncloa. La idea era poder disponer de un complejo que permitiese a los miembros del gobierno resguardarse de una gran crisis -léase un lanzamiento nuclear, un asedio militar, un ataque con armas químicas....- y coordinar la respuesta del estado con las fuerzas armadas y demás entes gubernamentales.
La construcción fue realizada por la empresa DRAGADOS después de que una comisión visitara distintas instalaciones militares similares por todo el mundo. Sus empleados fueron obligados a firmar estrictas claúsulas de confidencialidad, puesto que el trabajo que allí se desarrollaba fue calificado como "secreto oficial". Las obras se rodearon de un halo de misterio. A los funcionarios de la Moncloa se les informó que se estaba construyendo "un parking subterráneo". No se sabe cuanto costó la faraónica obra, puesto que el dinero salió de las partidas de fondos reservados. Algunas fuentes hablan de una inversión de 60 millones de euros, lo que da un idea de la enormidad de la instalación.
Imagen aérea del complejo de la Moncloa. En el punto amarillo estaría supuestamente la entrada al búnker de la Moncloa, conectado a través de túneles subterráneos con todos los edificios del recinto.
El complejo está revestido por gruesos muros de 3 metros de hormigón, capaces de resistir un ataque nuclear, y la puerta de salida es completamente hermética. El búnker tiene tres pisos y capacidad para 200 personas. Unos 40 funcionarios -eufemísticamente llamados por el personal de la Moncloa como los "búnkeros"- trabaja las 24 horas del día en el complejo para responder ante una eventual crisis a gran escala.
Este es la única imagen que se ha filtrado sobre el búnker de la Moncloa. Fue obtenida por un reportero de el diario el mundo que accedió en el año 2003 al complejo. En el plano se revela la distribución de las instalaciones del complejo en tres plantas.
El primer nivel es conocido como la planta 0. En él se encuentran los despachos de los representantes de los 3 cuerpos de nuestras Fuerzas Armadas - Ejército de tierra, Armada y Ejército del aire- y un ordenador que permite centralizar las comunicaciones con el resto de unidades militares del país. Desde estas habitaciones se gestionaría la "defensa final" de nuestro territorio. La planta 0 también cuenta con una sala de mapas, una zona de comunicaciones que retransmite emisoras de todo el mundo, una cámara acorazada para guardar objetos valiosos, una ducha de descontaminación radiactiva y un completo quirófano con una unidad de vigilancia intensiva. Como posible prevención para un ataque bacteriológico en la zona médica se guardan vacunas de virus como la viruela, el antrax...
Para descender a la siguiente planta, conocida como -5, los "bunkeros" pueden utilizar ascensores, un montacargas o las escaleras. Este nivel acoge la parte civil del edificio. Posee una sala de reuniones con biblioteca y archivo, otra para servicios de traducción simultánea y otra con un anfiteatro para proyecciones. En este nivel se encuentran las habitaciones de los inquilinos del complejo, distinguiéndose entre las habitaciones con dúplex y baño propio para las autoridades, y las habitaciones comunes para el resto de funcionarios. El búnker como hemos dicho tiene capacidad para albergar a 200 personas, entre las que se encontrarían los miembros del gobierno, funcionarios del búnker, representantes del estado mayor y las familias de todos de ellos. En la planta menos 5 también se encuentra la cocina, una cafetería restaurante y unas enormes cámaras frigoríficas donde se guarda la comida. Cada dos meses se renuevan las provisiones.
La planta -10 es la más alejada de la superficie. En ella se encuentran las salas de ordenadores, almacenes, habitaciones para el personal permanente, gimnasio, lavandería, un taller mecánico y otros servicios para los usuarios del búnker. El edificio es totalmente autónomo: posee dos grandes depósitos de gasoil de 40.000 litros cada uno para alimentar de energía el complejo en caso de apagón, depósitos de agua, depuradora, calderas, aire acondicionado, fosa séptica y dos pozos que toman agua a 200 metros de profundidad. Los moradores del búnker podrían resistir durante meses completamente aislados del exterior. En esta planta existe también una armería que esconde todo un arsenal y un pequeño cementerio que, por el momento, permanece vacío.
- El búnker de la Moncloa languidece, artículo de tiempo de hoy.
- El refugio de la élite española, conspiranoico artículo de las monedas de Judas.
- Por último, un interesante hilo de conversación en un foro militar sobre el búnker de la Moncloa.