Me estoy refiriendo a Pimco o a Goldman Sachs entre otros.
Los grandes bancos de inversión, que son los que compran la deuda de los estados en grandes cantidades, y dominan las subastas de deuda, son o se creen mucho más fuertes y listos que los tesoros de los países emisores, en especial de los países del euro que han de hacer frente a economías estancadas y déficit públicos desbocados que no saben cómo parar.
Es un David listo, ágil y poderos, que tiene el dinero, frente a un Goliat pesado, lento y débil que necesita ese dinero. En esa situación, me pregunto si la exigencia de mayores rentabilidades a los estados para comprarles la deuda está justificada o se trata de una actuación oligopolística.
Es decir, ¿fijan los grandes bancos de inversión, normalmente norteamericanos o anglosajones, los precios de compra a los que van a acudir a las subastas de deuda de los gobiernos, de modo que los tipos resulten deliberadamente altos en su propio beneficio? ¿Nadie se ha planteado esta posibilidad?
En algunos momentos, los tipos que se han llegado a pagar son injustificadamente altos, y muy sospechosos.