Experiencias y ratos inolvidables

Casi sin que nos demos cuenta el mes de septiembre ya se ha apoderado de forma silenciosa de nuestras vidas con lo que todo esto implica. De nuevo toca regresar a las costumbres. Una vuelta a la rutina que si queréis hacer más liviana os recomiendo leer la recomendación de esta semana. Así, la ‘vuelta al cole’ os resultará mucho más llevadera.

Hace unas semanas tuve la suerte de ser invitado por Groupon a su primera edición del Día de Groupon. Un encuentro con un grupo reducido de blogueros en el que nos iban a enseñar como, gracias a los diferentes y variados cupones de descuentos que ofertan, es posible montarse una tarde repleta de momentos inolvidables en Madrid ¡Y vaya si lo consiguieron!

Nuestro programa comenzó con una espectacular sesión de masaje a cuatro manos en el centro Fariolem Manila. Admito que no conocía este lugar y me pareció sencillamente impresionante. Nada más atravesar el umbral de la puerta de su local, ubicado en la Calle de Lagasca 80 es como si viajásemos en el espacio. Un sitio donde la actividad de nuestros sentidos se dispara….Olores, sonidos, un delicioso juego de luces, todo diseñado para envolvernos en una atmósfera de calma en busca del bienestar.

Después de degustar un té y de un rato de adaptación al nuevo habitat pasamos a la cabina donde pudimos disfrutar de un relajante e intenso masaje a cuatro manos. Nunca había recibido uno de este estilo y, la verdad, tan bien hecho. No sé me ocurre mejor opción para sacudirnos del estrés diario. Mi único pensamiento durante los 50 fabulosos minutos que duró la sesión era que ojalá el tiempo dejase de avanzar. Obviamente por muy fuerte que lo pensé aquel anhelado deseo nunca se cumplió. Sin embargo, salí con el convencimiento absoluto de que volveré ya que el servicio, el trato y la experiencia en este lugar resultó excepcional.

(El precio de este masaje es de 165€ pero a través de Groupon es posible adquirirlo a 49€).

A continuación tocaba cambiar por completo de registro y tras el rato íntimo y personal del masaje tocaba una actividad mucho más coral. Para ello pusimos rumbo a la Calle de Tomás López 2 y allí nos esperaba Juan y su coqueta tienda, La Muffineria. Allí, acompañados de un olor dulzón y colores alegres se nos pasó el rato volando.

En este alegre sitio Juan nos contó como abandonó su anterior vida laboral, como Ingeniero de Telecomunicaciones, y lo dejó todo por dedicarse a su pasión, los dulces. En La Muffineria no sólo adquirimos nociones teóricas (allí descubrí que un cupcake y un muffin no son lo mismo) sino que recibimos un curso en el que pudimos fabricar y decorar nuestros propios dulces, algunos con más maña que otros. Reconozco que no tengo mucha mano para esto (tuve que soportar alguna risa que otra) pero mis pequeñas obras de arte quedaron genial además de estar deliciosas. Un rato muy divertido y entretenido que los amantes de los dulces no deben dejar pasar por alto.

(El precio de un curso de elaboración y decoración de muffins es de 50€ y con Groupon se puede adquirir a 19,95€)

El broche final para esta gran jornada nos esperaba en el Paseo deRecoletos 37, en el elegante y primoroso Restaurante Columbus la última apuesta del chef Mario Sandoval, poseedor de una Estrella Michelín gracias a su talentosa labor al mando de su otro local, “Coque”. El lugar es sencillamente espectacular y la comida no es para menos. El menú contaba con numerosas opciones, en mi caso me decanté por una ensalada de langostinos a la vinagreta de tomate, , un huevo poché con rabo de toro y patata confitada y por último un solomillo de ternera con foie y frambuesa, de postre elegí el cóctel de piña colada en texturas. Una propuesta excelente y soberbiamente elaborada.

(El precio de este menú, para dos personas, es de 159€ pero a través de Groupon se puede adquirir por 79€).

Este es un escueto resumen de un día fantástico, con una gran compañía y con actividades y experiencias de primer nivel. Un sobresaliente plan con el que Groupon nos demostró como, con un poquito de organización, es posible montarse una jornada de ensueño y con unos precios más que interesantes. Caprichos y pequeños placeres de la vida que están ahí, esperándonos, a sólo unos clicks de distancia.

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