Tribuna.Rodolfo Rodil
En el acto autocelebratorio del pasado 25 de mayo, la Presidenta lanzó un desafío: “Los que quieren cambio que nos expliquen a todos los argentinos qué cambio quieren”. A continuación intentaré señalar, desde una visión progresista, cuál es el cambio al que aspiramos.
Queremos cambiar corrupción por decencia e impunidad por justicia. Que el Estado recupere el dinero público que fue a parar a los bolsillos de funcionarios o empresarios inescrupulosos. Cambiar el asistencialismo por la plena vigencia de los derechos sociales, empoderando a quienes necesitan del auxilio estatal y consagrando, por Ley, el derecho a la Asignación Universal por Hijo. Avanzar en el doble turno de escolarización que nos permita ir acortando la brecha que se abrió entre los alumnos de la escuela pública y los de colegios privados
Queremos cambiar el sistema tributario gravando la especulación financiera, la trasmisión gratuita de bienes y las manifestaciones de riqueza y, de ese modo, poder reducir la tributación a los sectores de ingresos fijos. Queremos devolverle autonomía al INDEC y restablecer un sistema de estadísticas confiable. Bajar la inflación, que degrada el valor de los salarios y los planes sociales, promoviendo el crecimiento de la economía, mejorando la productividad y estimulando las exportaciones para terminar con las restricciones que el sector externo impone a nuestro desarrollo. Respetar la división de poderes y terminar con la injerencia del Poder Ejecutivo en la Justicia. Cambiar la política de seguridad ciudadana ejecutando políticas públicas de fuerte impacto educativo, laboral y social en las zonas más castigadas por la inseguridad, conjuntamente con una estrategia integral de combate al narcotráfico. A la vez, las fuerzas de seguridad, la justicia, el servicio penitenciario y los organismos para la reinserción de quienes cumplieron una condena, deben contar con recursos y altos niveles de capacitación.
Queremos tener relaciones igualitarias con todos los países del mundo sobre la base de la libre determinación de los pueblos, sin estigmatizar a ninguno, promoviendo la paz y la lucha por la preservación del planeta. Queremos una ley de coparticipación federal que haga posible un federalismo real, en el que las provincias no sean rehenes del gobierno nacional a la hora de obtener recursos para sus presupuestos. Queremos acabar con el culto a la personalidad. Cambiar al comandante en jefe del ejército, acusado de haber cometido delitos de lesa humanidad.Terminar con el espionaje interno y el chantaje político. Queremos mejorar la Administración Pública, restituyendo las designaciones por concurso y los ascensos por mérito, para terminar con la colonización del estado, entre otras muchas cosas, quienes aspiramos a construir una Argentina con decencia e igualdad.
Rodolfo Rodil fue vicepresidente de la Cámara de Diputados de la Nación.
Fuente: clarin.com