Cuando conocí esta historia en lo primero que pensé fue en “El planeta de los simios” y me vi esclavizado a mí y a toda la humanidad por un grupo de primates proletarios rencorosos. Cuenta la leyenda que hace muchos siglos en China un campesino escalaba una montaña para recolectar un té muy sabroso que crecía en la ladera de ésta y un mono que lo observaba lo imitó y recogió el té que luego se lo entrego al campesino. Este cómodo hombre y sus vecinos comenzaron a entrenar a los monos del lugar para que recogieran ese té que tanto les gustaba. Pasaron los siglos y actualmente continúa esta práctica pero no ya de unos campesinos, sino que de una empresa que lo comercializa por Internet y asegura que los animales lo hacen sin ser forzados o lastimados. Es increíble lo que podemos llegar a hacer o mejor dicho es increíble lo que pueden llegar a hacer unos pobres monos sin cobrar un salario, sin estar sindicalizados o tener seguridad social. Si en un futuro llegamos a ser sometidos y gobernados por monos, el incidente que comience todo de seguro va a suceder a raíz de esta situación.