Ezcaray. Más que un pueblo
Puede que nunca hayas estado en Ezcaray pero seguro que Ezcaray ha estado cerca de ti. En contacto directo contigo. Piel con piel. Resolvemos el misterio: aquí se fabrican las butacas de los cines y teatros de medio mundo y son famosas sus mantas y bufandas, comercializadas por las mejores firmas.
Sin embargo, no hay que imaginarse Ezcaray como un pueblo industrial. Nada más lejos. Este municipio se vende como “la primera villa turística” de La Rioja y tiene argumentos. Su casco viejo conserva la arquitectura tradicional, el paisaje es de ensueño, se come de vicio (dos de las tres estrellas Michelin de La Rioja se han quedado en Ezcaray) y su gente es especialmente activa. En Ezcaray se organizan festivales de jazz, jornadas micológicas, fiestas de tradición medieval… cada época tiene su evento, lo que suma variedad a la oferta turística de la villa.
Más méritos: en su territorio se encuentra Valdezcaray, la única estación de esquí de La Rioja y San Lorenzo, el pico más alto de la comunidad autónoma. Para los amantes de lo lugares recónditos, a Ezcaray pertenecen nueve aldeas, cinco de ellas habitadas todavía. Y, por supuesto, es el lugar idóneo para practicar senderismo, para la micología y la pesca.
Si aún os faltan motivos para visitar Ezcaray, seguid leyendo.
Ezcaray: el pueblo.
La argolla símbolo del fuero de Ezcaray
Acercarse por la carretera a Ezcaray es una delicia. El camino ya nos va avisando de que lo que nos espera es bueno.
Para empezar, el casco antiguo de Ezcaray conserva la arquitectura tradicional de la zona, las plazas porticadas, los soportales y ese sabor de antaño. Además de las construcciones típicas, encontramos varias casas blasonadas, el ayuntamiento y la iglesia de Santa María la Mayor donde se celebran los Aleluyas, una tradición que congrega a la gente del pueblo debajo del balcón, al olor, cómo no, del dinero. El motivo: el domingo de Pascua las autoridades lanzan billetes, desde lo alto de la iglesia. Pero dejamos la tradición y caminamos fijándonos en otros edificios.
Empezamos por el ayuntamiento. El consistorio está ubicado en la antigua Real Fábrica de Tejidos de Santa Bárbara, un edificio levantado en el siglo XVIII y llamado así en honor a doña Bárbara de Braganza. Sin embargo, la actividad textil de Ezcaray comenzó dos siglos antes, en el siglo XVI. El auge del textil se mantuvo hasta principios del siglo XIX, cuando con la Guerra Carlista, la fábrica cerró. Hoy, el edificio es la sede del ayuntamiento, de un albergue y del teatro y de la tradición de los tejidos tan solo queda el telar Hijos de Cecilio Valgañon, unos fabricantes de textiles, que exportan sus mantas y bufandas a medio mundo. Si pasáis a la tienda, además de poder comprar una de las famosísimas mantas de Ezcaray, podréis ver una antigua cardadora del siglo XIX que conservan todavía.
El telar conserva una cardadora del siglo XIX
Además de mantas y bufandas, en el único telar que queda en Ezcaray hacen otro tipo de productos.
Caminamos dos minutos y llegamos a la plaza de la Verdura, un lugar que nos habla del pasado de esta villa. Aquí se encuentra una argolla que es símbolo del fuero de Ezcaray. Este fuero fue otorgado por Fernando IV en el siglo XIV. Lo que el rey pretendía con la concesión era repoblar una zona estratégica por su cercanía con la frontera del Reino de Navarra. Y por este mismo motivo, para que acudiese gente, a Ezcaray se le concedió el privilegio de la justicia. La villa, entonces, se convirtió en refugio de malhechores. El fuero se mantuvo hasta el siglo XIX, sin embargo, en 1484, se acotó la acogida a delincuentes.
Cerca de esta plaza de la Verdura está la del kiosco, la Plaza Conde de Torremúquiz, una de las estampas más típicas de Ezcaray y el lugar donde se celebra algunas de las tradiciones del pueblo como los bailes del día de Nuestra Señora de Allende, alrededor del kiosco.
La visita a la villa la podemos completar con los palacios del Ángel y el de la Barroeta, el crucero de San Lázaro, dando un paseo por todas las calles céntricas y entrando en sus bares de pinchos o sentándonos a la mesa de algunos de sus restaurantes, entre ellos, el archiconocido Portal del Echaurren, de Francis Paniego, merecedor de dos de las tres estrellas Michelin de La Rioja.
Pero Ezcaray no se acaba en el pueblo. En los alrededores nos esperan el valle del río Oja, las montañas, varias aldeas y las ermitas de la Virgen de Allende y Santa Bárbara, patrona de los mineros.
Los alrededores
Ermita dedicada a Santa Bárbara, Ezcaray
En Ezcaray estamos rodeados. De naturaleza, de paisajes y de aldeas. Algunos de los lugares que merecen la pena se encuentran a pocos metros del pueblo y otros, a varios kilómetros, en la Sierra de la Demanda y en el Valle del Oja.
Empezamos cerca del pueblo, en la antigua estación de tren. Cruzamos el puente sobre el Oja, y llegamos a un edificio de un color azul intenso, reconvertido hoy en cafetería. De aquí parte la vía verde del Oja, una ruta que discurre desde Ezcaray hasta Casalarreina, pasando por Santo Domingo de la Calzada. Este sendero transita por las antiguas vías del Bobadilla, un tren que utilizaba, en sus primeros años, los vagones de madera de los trenes correo. En ese momento, a principios del siglo XX, el billete costaba 0,10 ptas. por kilómetro en primera clase y 0,055 en tercera. Tomando una cerveza en la viaja estación, podemos imaginar cómo los viajes en aquellos trenes que cubrían el trayecto entre Ezcaray y Haro.
Antigua estación de tren de Ezcaray
Cerca de la estación de tren, siguiendo un camino asfaltado, se encuentra la Ermita de la Virgen de Allende. Esta ermita, de origen barroco, alberga una colección de cuadros de ángeles arcabuceros traídos desde Perú y la talla de la Virgen de Allende. A la patrona la sacan en procesión el día 24 de Septiembre.
Ermita de la Virgen de Allende, Ezcaray
Dejamos la zona de la estación y de la ermita de la Virgen de Allende para visitar otra ermita, la de Santa Bárbara. Situada en alto, esta pequeño templo nos muestra la inmensidad del paisaje de Ezcaray y sus alrededores. Existe el peligro de que las vistas eclipsen al monumento, sin embargo tenemos que dedicarle el tiempo que se merece y admirar esta pequeña construcción que homenajea a la patrona de los mineros y es que, además de telares, en Ezcaray, durante mucho tiempo hubo una importante actividad minera.
Hay más templos, también bellos y simbólicos, repartidos por las aldeas de Ezcaray. Estas localidades parecen hechas para los amantes de lo tradicional y de los lugares abandonados o prácticamente desiertos. En algunas de ellas no existen ni siquiera las calles asfaltadas, en otras se han abierto, en los últimos años, alojamientos rurales. En total, son nueve, cinco de ellas habitadas. Sus nombres: Altuzarra, Ayabarrena, Azárrulla, Cilbarrena, Posadas, San Antón, Turza, Urdanta y Zaldierna. Algunos de los topónimos tienen su origen en el Euskera, un idioma que tuvo una gran presencia, durante siglos, en el valle.
El rio Oja es ideal para pescar truchas.
Para quien venga buscando turismo activo y deporte en Ezcaray también va a encontrar su sitio. En la Sierra de la Demanda se encuentra San Lorenzo, el pico más alto de la comunidad, donde está Valdezcaray, la única estación de esquí que existe en La Rioja. Los alrededores de la villa también son el destino perfecto para buscadores de setas y pescadores que acuden al río Oja a por sus truchas. Los senderistas pueden disfrutar de varias rutas, entre ellas, la Vía Verde del Oja o el GR-93 – Sierras de La Rioja, un sendero de gran recorrido que, desde Ezcaray, lleva a San Millán de la Cogolla, el lugar donde están los monasterios de Yuso y Suso, famosos por la importancia que tuvieron para nuestro idioma. Por su otro extremo, el GR 93, conduce a Santo Domingo de la Calzada y a su catedral.
Vayas buscando lo que vayas buscando, Ezcaray te recibirá como te mereces. Felices viajes.
Los alrededores de Ezcaray están llenos de senderos como el GR 93 o la vía verde del Oja. Es un placer descubrirlos.
Ezcaray en la radio.
Podeis escuchar en Caminates, en Radio 5, algunas de las rutas de senderismo que existen en los alrededores de Ezcaray.
Ezcaray a pico de San Lorenzo Ezcaray a pico de San Lorenzo- Compártelo: