Revista Poesía
TROCCHI, ALEXANDER. Escritor de origen italoescocés que goza de una ambigua reputación de genio yonqui, admirado por personalidades tan dispares como Samuel Beckett, Guy Debord (con quien mantuvo una estrecha amistad), Norman Mailer, Terry Southern, Marianne Faihfull, William Burroughs (que veía en él al "poeta metafísico moderno") o Kathy Acker. Trocchi vivió durante un tiempo la bohemia del barrio latino parisino escribiendo, en plan alimenticio, novelas eróticas publicadas, bajo el patrocinio de Maurice Girodias, en Olympia Press con seudónimos tan elocuentes como Frances Lengel y Carmencita de Las Lunas. Instalado en Nueva York, la justicia estadounidense no tardó en fijarse en él y se dedicó a afearle su asocial estilo de vida y su creciente consumo de estupefacientes. A punto de ser detenido en 1961, Alexander Trocchi huyó llevándose puestos dos trajes que pertenecían a George Plimpton. Su obra maestra, la muy sulfurosa novela semiautobiográfica titulada El libro de Caín, narra las trastadas perpetradas por Joe Necchi, un drogata neoyorquino que solo acata sus destructivas reglas del juego, orillando por momentos el límite de lo tolerable en lo tocante a cinismo. Los detractores del libro le reprochan que su autor sea poco menos que un prosélito de la heroína. Otros, como Greil Marcus, así como un puñado de esnobs literarios convencidos de su grandeza, ven en Trocchi, quien se autoproclamará "cosmonauta del espacio interior", a un brillante cometa condenado a consumirse por su deseo de permanecer a toda costa fuera del mundo y de sus leyes. Ese Savonarola de la causa underground murió en Londres en 1984, a los cincuenta y nueve años, totalmente degradado, tras subsistir durante años ejerciendo de camello, notablemente de Eric Clapton, y como vendedor de libro de segunda mano en el rastrillo de Portobello. Dejó tras él una estela de cadáveres, entre otros os de su segunda mujer y sus dos hijos.