El beso de la sirena de Andrea Camilleri
Gnazio regresa de América para instalarse en su Sicilia natal. Encuentra un terreno con un olivo milenario y construye su casa, formada por cubos de 3 metros cuadrados. Las paredes contra el mar y las ventanas mirando al árbol. Labra la tierra y cuando ya está asentado, pide ayuda a la vieja Pina (siempre cargada con sus hierbas medicinales) para buscar mujer. No es fácil de complacer hasta que aparece Maruzza. Es la más bella, pero a veces se cree una sirena…
Una hermosa fábula con cantos entonados por voces femeninas. El regreso a los orígenes, a los griegos, a la tierra y al mar. El amor de dos personas que en apariencia no tienen nada en común; el respeto. La entrañable y extravagante bisabuela Minica, el primer parto bajo el agua, la visita del fotógrafo, unos vasos de vino y el poder hipnótico de este precioso libro.Un día de mucho calor, cuando la tarde cae, un pequeño paseo de improvisación por la cercana Portugal. El interior, tan desconocido.
Nadie se anima a subir las escaleras.
Desde aquí se ve muy bien.
Uf qué calor!!!
Una cerveza y los terribles exabruptos sonoros de un borrachín que transmite amargura.
Esperando la cena, con el perrín amigo, a la puerta de la casa de una mujer que los cuida, los quiere y nos cuenta lo duros que son sus inviernos.
Carretera para los fans de las curvas, entre montañas, y llegada a la bella Arcos de Valdevez.