Factor Fulana, por Juguetona

Una personita curiosa que he descubierto gracias a Chuloplaya y James Bond, por casualidades de la vida. Desde aquí un saludo a la señorita Juguetona, y un agradecimiento por compartir reflexiones como ésta con todos nosotros.

A partir de aquí, dejo que os cuente ella lo que tiene que contar.

Premio a quien adivine quién es la moza. Qué rica está, por cierto… xD

Este post… ¡No lo he recortao! Y os aviso, antes, que es muuuyy laaargo, y quizá aburrido… ó cuanto menos ¡nada divertido!

Pero es que no he podido hoy sacar un poquito de humor, después de leer algunas opiniones sobre este tema en otro blog…  Dicen que no debería afectarnos opiniones ajenas y tal, que si nos disgustamos, el problema es nuestro… Pues, chica, ¡tendré un problema! Pero me afecta que hagan creer, sobre todo a los más jóvenes, cuyas creencias, y por tanto, formas de sentir y experimentar en el fururo, y sus posibilidades para construir relaciones positivas, dependerán tanto de estos modelos, (héroes) a los que tanto admiran y a quienes dan tanta credibilidad…

Y como no me apetece nada exponer allí la mía, porque caería en un saco roto, ni tampoco puedo callarme, pues aprovecho este diario, y aunque solo sea para mí misma, ¡para no explotar! jaja pues largué aquí, tal como me fue saliendo, lo que pienso y lo que siento, justo en este instante… Y con todo lo largo que me ha salido,  es que ¡aún siento que me quedo corta y con muucho más que decir!

Pero lo dejo tal cual, y además ¡lo publico! ¡Ale! Quién sabe si, a lo mejor, le sirve a algún chico, ó a alguna chica, para… No sé…¿liberarse de esas creencias, y ¡Disfrutar de la vida y el sexo con libertad y responsabilidad! y  sin sentir que sea pecado, ó que sea motivo de verguenza, ni temor a que, al menos aquí en España, se le lapide, ó menosprecie en su valor como ser humano…

Es un tema este, que… ¡Me toca las narices! Que se ha escrito mucho sobre él, sobre todo desde un punto de vista, que a mí, me parece machista y manipulador, y que causa muchos malos entendidos, y perjudica enormemente a los chavales y chavalas, que buscan información, movidos por el deseo de aprender a disfrutar del juego de la seducción, dificultando la posibilidad de entablar y disfrutar entablando y construyendo relaciones positivas entre hombres y mujeres, impidiéndoles vernos como iguales, tratando de regresar a una forma de pensar y actúar y juzgar, y condenar, que se impuso a la fuerza en un pasado, de la que todavía hoy, estamos sufriendo y padeciendo sus graves consecuencias, sobre todo con la violencia de género, que desde mi punto de visto, tiene su orígen en ese falso concepto de considerar a la mujer como un ser diferente, creado para ser portadora y madre, como fin primordial, y que debe fidelidad y exclusividad a un solo hombre, para que pueda ser considerada digna y con valor…

Os pido pues, perdón, por lo largo y denso del tocho, a tod@s los que se animéis a conocer mi humilde, y personal opinión al respecto… Y a los que no, perdón por no poder hoy ofreceros algo más ligero y divertido.

El Factor Fulana.

Con este bonito nombre bautizan también, (es que, jamía’ , si no es por h, es por b, pero para una toda mente estrechada por una educación machista, todas acabamos catalogás’ de fulana por una cosa ¡y por todo lo contrario! ¿Se habéis fijao’?  Si eres pomiscua, ¡fulanilla! si eres difícil, ¡fulana! Si inteligente, ¡zorra! si boba, ¡putilla! si no cobras y,  se te nota que te gusta el sexo, ¡putona! )

Pues eso, en algunos manuales y foros de seducción, se le llama factor fulana, (según he podido yo entender) a un condicionante social, y hay quienes se atreven a afirmar, que  genético, que tienen las mujeres, (supuestamente a diferencia de los hombres) que les impide disfrutar de la libre y responsable práctica de la sexualidad, si no es con el fín de crear una familia, 8O  y que provoca en ellas  una “incomodidad”, sentimiento de culpa, ó sensación de ser persona sin valor, ó poco selectiva, a toda aquella, que no reserve su virginidad y la satisfacción de su innato apetito sexual a un solo hombre, ó en su defecto, a un mínimo y muyyyy selecto número de hombres.

Pero selecto, no porque estén pá mojá pan, y sientas que te suben, excepcionalmente la libido a mil, y para darle un pequeño homenaje a tu cuerpo, sin más pretensiones que compartir un buen momento…  sino selecto para ejercer de buen padre de familia.

Si un tío te sube la libido a mil, y no puedes resistirte a caer fácilmente en sus brazos y disfrutar de su oferta de buen sexo sin compromiso… ¡Entonces se supone  que  sentirás que te falta valor como mujer! Porque saltará el factor fulana genético y social, que se supone que existe por “nuestro bien” … Y  Se supone que ellos también, no solo el que se acuesta contigo, sin que opongas resistencia, dejándote llevar por tu sano y del todo natural deseo sexual despierto, sino todos los que adviertan tu… buen apetito y lo fácilmente que “le buscas satisfacción”  te despreciarán como posible pareja estable y madre de sus hijos…

Jejeje… Es que me hace gracia eso… ¿Que te despreciarán como pareja si observan lo que te gusta el sexo y que te sientes liberada sexualmente, que eres madura, inteligente, sociable, divertida, segura e independiente? ¿Aquí en España? 8O  ¡Te pedirán pá reyes! Y desearán tener, lo que hay que tener, para lograr seducir y enamorar a una mujer independiente y sin represiones, y conseguir que tú desees serle fiel y dedicarte en cuerpo y alma SOLO a él! ¡¡Y convertirse en el macho más envidiado y admirado! jaja… Vamos… exactamente igual que si eres un tío que le encantan las mujeres, y no necesitas, ni buscas una novia, ó una mamá para tus hijos… ¡Todas querrán ser esa mujer taaan completa y seductora que logre enamorarte y llenarte en todos los aspectos, hasta el punto que ninguna otra pueda interesarte!

Es cierto que hombres y mujeres (por igual) sienten esa incomodidad y esa falta de valor, pero, solo cuando ofrecemos algo (lo que sea) que sentimos que es mucho, a cambio de muy poco, y obedeciendo, no a un deseo físico, o sano apetito sexual despierto, sino obedeciendo a un sentimiento de necesidad… Cuando ofrecemos, lo que sea, obligados, ó forzados… a actúar de un modo concreto, (políticamente correcto) como sumisos a un abuso de poder de otro, que es el que pone las condiciones,  a quien consideramos, que posee algo que nosotros no mereceríamos si no  encajamos en su… gusto, ó si no estamos en disposición de poder garantiarles una exclusividad y obediencia ciega, y un deseo de forjar una relación, en la que debemos asumir un determinado rol ó papel de… madre.

Nos sentimos mal, no cuando aceptamos una relación sexual y pasajera, si es justo eso lo que nos apetece, sino cuando aceptamos una relación de sumisión, y desigualdad en derechos y obligaciones, en la que uno pertenece al otro… Y el otro tiene derecho a ser libre de forma justificada por su… especial naturaleza sexual y su instinto de fertilizar a cuantas más hembras mejor…

Las mujeres, como los hombres, desde edades muy tempranas, tienen necesidades puramente fisiológicas, ¡Idénticas!

Son necesidades humanas, para nada avergonzantes, que por imperativo biológico y en bien de la salud tienen que ser cubiertas.

A un niño no le averguenza sentir que no puede conseguir su alimento por sus propios valores y medios… Pero a medida que vamos creciendo, nada nos sube más la autoestima que aprender a obtener la satisfacción de esas necesidades por nuestros recursos, habilidades, conocimientos y valores adquiridos por propia voluntad, en pos de alcanzar una determinada independencia y autonomía y libertad de acción.

El apetito sexual, como el apetito por la ingesta de alimentos nutritivos, y el apetito por adquirir nuevos conocimientos que nos permitan desarrollar nuestra inteligencia, es el mejor indicativo de buena salud, física, emocional e intelectual, que puede existir; y una persona satisfecha en todos esos aspectos, difícilmente tendrá problemas para seducir y obtener éxito en sus relaciones sociales.

Por eso es muy importante para seducir, seas del sexo que seas, sentirte satisfech@ sexualmente. ¿Cómo va a perjudicarte de ningún modo que te sientas bien servida y que mereces esa satisfacción plena? ¿Cómo va a bajar tu autoestima saber cómo despertar en un hombre el deseo de… hacerte gozar sexualmente? ¿Y cómo va a perjudicar tu autoestima ser económica e intelectualmente independiente y autosuficiente, y sentir que no necesitas a ningún hombre para que cuide de tí y te provea de seguridad y valor con su aprobación como madre?

Aunque suene vulgar, lo primero que deducimos cuando nos encontramos a una mujer, (u hombre) antipática y de trato desagradable es:

” Esta tía (o), ¡¡lo que necesita es un buen polvo!!”

¿Es verdad, ó no, que lo pensamos y lo sentimos así?

Y las mujeres, como los hombres tienen ese apetito sexual desde muy temprana edad… aún antes de tener siquiera una vaga noción del enamoramiento, o deseos de ser madres, ó padres… ¡Son cosas diferentes! ¡No están ligadas! No tenemos tiempo de celo… ¡No! Tenemos deseos sexuales antes, durante, y después de la ovulación… Incluso mucho después de la menopausia… Y esto no es una teoría… Es lo que es… Podéis comprobar como la mejor etapa de la mujer, en lo sexual, se inicia justo cuando la fecundación ya no es posible…

Y el deseo sexual aparece mucho antes que el deseo de egendrar;  en cuanto alcanzamos la conciencia de ese deseo y la madurez necesaria para aprender a satisfacer ese apetito, con madurez,  responsabilidad y seguridad… Desde el respeto y la admiración, y el amor hacia el otro sexo,  y a disfrutar satisfaciendo el deseo sexual de quienes despiertan nuestra sensualidad, nuestro erotismo, nuestro deseo de darnos y satisfacer a otro ser humano, y todo eso tan hermoso que despiertan algunas personas del otro sexo en nosotros, y que nada tiene que ver con el deseo de tener hijos, que no siempre aparece.

Cierto, que en las culturas machistas, un hombre no se casa con una mujer, sin comprobar antes su virginidad… Se le exige esa virginidad como condición indispensable para ser considerada digna de ser elegida como madre y esposa; como si tal hecho (la virginidad, ó la poca experiencia sexual, ó la estrechez ó lo difícil que le pongas a un tío, por más que consiga subirte la libido a mil, la posibilidad de acostarse contigo) garantizara su capacidad para ser fiel y mantener una relación monógama, y otra má promiscua no pudiera ser fiel, cuando se enamore de un hmbre que la llene totalmente y en todos los aspectos, además del sexual…

Claro que para que para ello, las mujeres se casaban no más tarde de los 14, ó 15 años… Porque es que si no… ¡A ver quién pillaba a una de 26, que no hubiera “perdido” esa dudosa garantía! Y es que… ¡La naturaleza nos empuja pal monteeee telaaa! Y ni condicionantes sociales, ni ná… Llegadas a una edad… ¡el apetito sexual,  es bestial! Y cuando hay apetito…  ¡Cómo no vamos a caer fácil! jajaja ¡Y a falta de pan, buenas son tortas! ¿O no? La que no … ¡que por favor me lo diga! Aunque se empeñen en hacernos creer que a  las mujeres, la naturaleza solo nos empuja hacia la búsqueda de un marido y la maternidad! ¡ja!  ¿No es la experiencia y la madurez y el hecho de poder comparar mejor garantía que realmente eliges convencida de querer mantener una relación monógama, que el hecho de hacerte la difícil, ó la estrecha?

Por supuesto a los hombres, en cambio, su promiscuidad y la disposición, facilidad y disponibilidad para aceptar tener experiencias sexuales con otras mujeres, se supone, que no les convierte a nuestros ojos, en necesitados, ni poco valiosos, ni  sospechosos de ser previsiblemente futuros maridos infieles, ni padres irresponsables ¡Sino en machotes!   jejeje… Claaaro que  no… porque hombres y mujeres ¡son diferentes en eso! ¡Tienen naturalezas diferentes! ¡Ellos no se quedan preñados! jaja… ¡Pues cuéntaselo a Jaime Ostos, Pepe Navarro y todos estos que tienen que pasar pensiones y mantener por cohones a cada hijo que han tenido, cuando solo querían disfrutar de su sexualidad! Eso de tener los hijos solo con quien deseemos y cuando deseemos, también es común en ambos sexos… ¡Y ambos nos la jugamos! Es más, el hecho que existan tantas madres solteras, no es más que la prueba que las mujeres cuando se acuestan con un hombre, ¡no les seleccionan por buen padre! ¡Sino porque les sube la libido! ¡Y solo por eso!

Las mujeres, se creen estos, que nos basta con tener un marido y un papá para nuestros hijos para sentir que hemos triunfado en la vida ¡y que lo valemos! Aunque nuestro maridito tenga que salir en busca de fulanas para satisfacerse sexualmente, porque… a una mujer que lo vale… se supone que su factor fulana, ¡la vuelve tonta! Y prefiere ser elegida antes, como buena madre, que como buena amante…

Pos vale… si tú te lo crees… ¡Yo no te lo voy a discutir! La experiencia te traerá a la realidad… Ninguna mujer, con un mínimo de inteligencia y autoestima, ¡aceptará como compañero a un hombre que así lo crea! Ya os digo, que no es que exista mujeres que genéticamente tengan ese factor, y las que no… Las primera selectivas y con valor social y las segundas zorritas para usar y tirar… Existen mujeres con autoestima y amor propio, y mujeres que no… Las primeras, jamás se sentirán utilizadas, ni disminuidas, ni con poco valor, ni siendo promiscuas, ni siendo monógamas… Porque serán lo que elijan ser en la vida.

Los hechos han demostrado sin duda alguna, que realmente esa virginidad, ó… falta de experiencias sexuales con otros hombres,  no garantiza esa capacidad de compromiso y fidelidad… Esa garantía solo puede surgir de una decisión libremente y con gusto tomada, desde una madurez y una responsabilidad, y, sobre todo, desde un profundo sentimiento de amor y respeto, hacia uno mismo, y hacia esa persona que amamos y con la que nos comprometemos a iniciar una relación monógoma y a construir un futuro común y una familia… con hijos, ó sin hijos, si por  casualidad, uno de los dos fuesen estériles… Desde una elección tomada con conocimiento y entre muchas opciones… Y no por imperativo social, ni represores factores fulanas de ningún tipo, ni social… ni genético.

La fertilidad es un don precioso… Una facultad realmente maravillosa, pero por fortuna, la esterilidad para nada nos convierte a los seres humanos en indignos de ser amados, ni nos incapacita para amar, ni para seducir y ser seleccionados como la mejor pareja posible…

Ni siquiera nos incapacita para ser espléndidos padres y madres de los hijos de otros hombres y mujeres, que, siendo fértiles, no poseen esa capacidad de amar y cuidar con generosidad, eficacia y entrega total a sus propios hijos… Por más fieles y monógamos que puedan ser, ó más vírgenes que hayan llegado al matrimonio… Y esto NO es una teoría… Es un hecho irrefutable.

Que una mujer llegue virgen al matrimonio, está demostrado, que por el contrario de lo que se puede creer, ó pretendan hacernos creer, va a sentir la necesidad imperiosa de probar a otros hombres… Porque la naturaleza humana es…así de curiosa, y dada a experimentar…

De la misma forma, que cuando a una chica le preguntan si podría enamorse de un tipo mujeriego, aventurero e irresponsable, que se acuesta con la primera mujer que se le pone a tiro, la chica responderá con un rotundo NO, y luego… Luego… Resulta que la que más y la que menos, al menos una vez en su vida, ha podido comprobar que el enamoramiento y el amor no lo despierta siempre quién más se lo merece, ni quien más te “conviene”… A cualquier chico que le preguntemos si podría desear una relación estable con una chica, que hasta el momento de intimar con ella, esta haya sido promíscua y “fácil” te dirá que NO…

Pero La realidad es, que los foros de seducción y las consultas están llenas de posts de chicos enamorados de chicas reacias a comprometerse con ningún chico, de momento, y sin renunciar mientras tanto a su faceta sexual, ni frustar, ni renunciar a la satisfacción de su sano y natural apetito sexual… Segura que, cuando conozca al hombre que realmente la enamore, ó la llene en todos los sentidos, sin ningún esfuerzo, el compromiso y la fidelidad se instalará en su corazón, junto al amor. Y además son mujeres que despiertan en los hombres un hondo deseo de enamorarlas y… ser sus parejas estables.

Que la sociedad aún intenta manipular, castrar sexualmente y castigar la conciencia en este sentido a las mujeres es obvio e indiscutible… Y se hace evidente en el nombre que dan a ese factor… “factor fulana” Que efectivamente una mujer puede sentirse mal consigo misma por sentir esos deseos sexuales y satisfacerlos por la interiorización y asimilación de un mal e injusto aprendizaje, ¡es indiscutible! Pero desde luego que para mí, no es, ni será nunca, ese factor fulana, más que un intento de someter y castrar a la mujer al dominio de los hombres, que por propia debilidad, sentirán como una amenaza el hecho que sus parejas sean independientes y autosuficientes, y se sientan libres de elegir.

En mi opinión, no es un factor, sino un Principio Universal de seducción, común para hombres y mujeres, eso de no entregarse siempre fácilmente… La insinuación, el reto, lo difícil, lo prohibido, no ser sumiso, ni mostrar urgencia, ó necesidad… Todo eso resulta seductor en hombres y mujeres. ¡Claro que sí!

Ese Principio de no ser siempre gratis, ó no estar siempre disponible, ese sentimiento de “Merecernos recibir y sentirnos obsequiados para obsequiar con  nuestros dones” El  “Yo gano, tú ganas”,  es común en ambos sexos, y responde a una buena autoestima, amor propio, y deseo de generar un mayor, ó más duradero deseo en el otro, más que a la selectividad de un padre, ó una madre fieles.

Que además  funciona igual que puede funcionar la entrega total y generosa al otro…

Negarse, retar al otro, poner cierta dificultad al otro, postergar la satisfacción del propio deseo, para aumentar la del otro, puede resultar tan exitante y seductor, para hombres como para mujeres, y como una oferta directa, ó un trato fácil y fluido… Como puede seducir de igual forma mostrar la inteligencia, ó el humor, como mostrar un físico bello, saludable y apetecible… Todo depende de qué sientes tú que en ese momento y a esa persona puedes ofrecerle, sintiendo que es algo de gran valor para TÍ… y QUE TE APETECE ofrecerle, por gusto y con gusto, ¡y no por temor, ó necesidad!

Pero una mujer, como un hombre, no siempre desea provocar un vínculo profundo y duradero; como no siempre le apetece forjar una amistad del alma … A lo largo de la vida, son pocos los amig@s del alma… Pero no por ello, el resto de amistades dejan de ser importantes y de aportarnos sentimientos y ricas experiencias, que nos alimentan y enriquecen como seres humanos.

Está claro, que a cualquier hombre, también le provoca un profundo pesar ó incomodidad, ó sentimiento de poco valor, cuando siente que da mucho y recibe muy poco; pero no le llaman a esto factor fulano, en un intento absurdo, desde mi punto de vista, de diferenciar al hombre de la mujer, cuando el sentimiento es el mismo en el factor fulana, que en el factor  sumiso ó de necesitado, y cuando en la seducción se trata de buscar un común deseo, y un común sentimiento.

Sentimientos humanos.

Para que una relación, del tipo que sea, sea positiva y enriquecedora, todas las partes han de sentir que dan y reciben en un equilibrio justo y necesario, en una armonía y una fluidez natural, y para nada forzada, ni obligada,  que solo es posible cuando ambos son personas completas y satisfechas, que deciden su unión, ó iniciar un juego de seducción por amor, ó por placer, y no por necesidad de ningún tipo, sin perder para nada el sentimiento de libertad e independencia…

Una mujer puede mostrarse fácil a la hora de disfrutar de su sexualidad, que no por ello, cuando se enamore, si se enamora, pierde su capacidad para inspirar confianza en ella, y su palabra, ó compromiso de fidelidad en el hombre que ame… ¿Por qué no? ¿Quién dice que no? Una mujer libre para elegir, independiente económica, intelectual  y emocionalmente segura de sí misma,cuando elige una relación monógama, no puede ofrecer mejor garantía de la vercidad de su compromiso y su decisión de mantenerse fiel.

Pero que genéticamente estemos condicionadas para NO seducir, ó calentar consciente y claramente, exhibiendo nuestro apetito sexual y atributos físicos más puramente sexuales… ¡Por faaavor!

Si yo muestro mi escote es porque yo  encuento bellos mis senos, dignos de ser acariciados, dignos de admirar, de desear… Dignos de ser amados y apreciados como un hermoso regalo para la vista, las manos, la lengüa, la imaginación… Y por supuesto que, aunque mi vientre resultara infértil, considero mis senos totalmente aptos para acunar y acoger al hijo de cualquier hombre, y ofrecerle la seguridad, el consuelo y todo el amor, la alegría, la fuerza y la ternura del corazón que palpita bajo mis pechos…

Nunca he sentido ese factor fulana cuando he permitido fácilmente a algún hombre que goce y me haga gozar, dispensando a mis senos todas esas caricias, que siento que mis senos merecen recibir…

Otras veces he optado por por postergar ese deseo de dejarmelos acariciar, ó por mostrarlos generosamente, porque simplemente, he sentido más adecuado ofrecer otras cualidades de mi ser, igual de valiosas y dignas, que  mi sexualidad… ¡Con idéntica proporción de éxito, ó ineficacia en ambos casos!

Pero como siempre he ofrecido lo que yo sentía que realmente era valioso, y lo he hecho por placer y con gusto, y no por obligación, ni por necesidad, ni por aparentar ser más casta, ó más promiscua, sino que he actuado de forma coherente a mis sentimientos,  haya sido aceptada, ó rechazada, la relación haya sido duradera, ó de apenas unas horas… Jamás me he sentido utilizada, ni disminuida en mi valor…

Mi valor, como mujer y como ser humano, por fortuna, no depende de la aprobación de ningún hombre, ni de la capacidad de amar de ningún hombre, sino de mi propia capacidad de amar, de la autonomía, independencia y libertad que yo misma he alcanzado… De mi madurez y el óptimo y progresivo desarrollo de mi ser… Y del grado de satisfacción que he logrado mantener en todos mis deseos, y de la fe que siento en mis posibilidades para lograr materializar todos mis sueños y llegar hasta donde yo desee llegar.

Si existe un estímulo poderoso y efectivo, ante el cual un hombre sucumbe indefenso, con el riesgo de perder incluso su norte, su deseo de mando, y hasta la razón, jejeje, es ante la contemplación de una mujer hermosa y evidentemente dispuesta y liberada sexualmente. De ahí, la sentencia extraida de la sabiduría popular:

“Más pueden dos tetas que dos carretas”

Social, moral y éticamente, es natural que sea censurable que una mujer abuse de este poder, que la sabia naturaleza ha otorgado a la mujer,   NO para dominar y someter al hombre, SINO  para alimentar su virilidad y enriquecer su existencia, y que perciba en ella su aliada perfecta, parte inseparable de su existencia, sin la cual, su vida y su ser  estarían incompletos, y despertar en él, el deseo de unión, y de permanecer juntos, en  una vida en pareja; y yo, que he nacido en una época y una sociedad que intenta ser justa e igualitaria en libertades, derechos y obligaciones fundamentales, así lo siento…

No dudo que la naturaleza haya dotado a la mujer y al hombre con recursos diferentes, que aliados, hagan de la pareja, ó la unión de ambos, el mejor y más poderoso equipo para poblar la Tierra, y asegurar la continuidad de la vida en ella.

Pero tampoco me cabe duda, que si nos ha dotado de inteligencia y capacidad de elección, y capacidad para ser libres y vivir como elijamos, relaciones eventuales, ó polígamas, ó estables y monógamas, de acuerdo a nuestros sentimientos… No puede valer menos la persona que decida vivir sin pareja estable, ni tener hijos, porque entonces ya se habría extinguido, en lugar de cobrar cada vez más fuerza, y ser mayor el número de personas que escogen  la opción de vivir solteros y sin compromiso .

Y es que, no es difícil de entender, que las alianzas surgen y se hacen indisolubles, solo cuando existe amor…

Solo el amor logra que un hombre te sea fiel, y solo el amor logra que una mujer te sea fiel… Ni hijos, ni papeles firmados, ni intereses económicos, ni el que dirán, ni la violencia, ni el miedo al embarazo, ni la falta de experiencias sexuales… Nada te garantiza la fidelidad, seas hombre, ó mujer, más que el amor, y la contemplación y el trato y el respeto al otro, como un igual a tí …

Porque ambos sexos son igual de humanos, y tienen el mismo valor, para que ninguno tenga que someterse a otro, o pertenecer en exclusiva al otro, y el otro pueda ser promiscuo… No sé… Yo creo que de esta creencia surge eso que llamamos violencia de género…

Dar placer, ó complacer sexualmente al otro, NO es el precio a pagar a cambio de unas prestaciones, NO. Tampoco es símbolo de sumisión, ni dominación… Ni siquiera es la forma de asegurar la transmisión de unos genes, ó un proveedor, ó protector fuerte para la descendencia… ¡NO!

Si eso fuese así, jamás el ser humano hubiera invertido tantos esfuerzos y tiempo en hallar la forma de poder practicar sexo sin el riesgo de concepción.

El factor fulana y la violencia de género, solo tienen, en mi opinión,  una causa que lo origina:

La NO contemplación de la pareja como un igual. La lucha por imponer una relación desigual, con un superior y un inferior; un dominante y un dominado… Y a mí me parece un grave error tratar de buscar, inventar, establecer, imponer y mantener esas diferencias…

La seducción, en su orígen, NO es una lucha, ó guerra entre sexos, donde uno siempre tiene que acabar sometido al otro…  sino Un juego…  ¡Una danza! ¡Un baile! ¡Una fiesta! que tiene lugar cuando el hombre y la mujer se reconocen como iguales, como parte de la fuerza, los triunfos, la seguridad,  y la alegría de ser y vivir del otro!

Cuando ambos se sienten iguales, aliados, y compañeros ideales, para hacerse mutuamente el amor, y  la vida más fácil, más plena, más divertida, y… Más placentera… Con hijos, ó sin ellos…

Juguetona.