De vez en cuando hay que tomarse un minuto para hacer algo para casa, aunque realmente es para que mi hija lo lleve al colegio. Todos los años una de sus maestras prepara un intercambio de huevos de pascua y en esta ocasión hemos probado con esto. Sencillo y bonito. Algo diferente al huevo pintado de siempre. Nunca había hecho nada con el falso patchwork y ¡me ha encantado!.