
THE CROCODILE´S DILEMMA (12 DE OCTUBRE DE 2014) -AVISO SPOILERS-
Sé que habéis visto Fargo. Y sé que probablemente habéis disfrutado con la serie sin darle demasiadas vueltas a su sentido más profundo. No pasa nada. Se puede ser espectador de una obra y apreciar su calidad sin necesidad de comprenderlo todo, igual que se puede vivir y ser feliz, sin ser consciente del sentido de la existencia. Pero quiero permitirme, humildemente, "despertaros". Al menos en lo que respecta a
esta serie. Lo que vais a leer a partir de ahora es mi mirada sobreFargo que, quizás, no sea más que una interpretación completamente equivocada.
Noah Hawley -creador y guionista de la serie- se inspira en la película homónima de 1996, reflejando el tono, los escenarios, la música, sus personajes y sus situaciones. Pero parece levantar su historia criminal -al menos en esta primera temporada- sobre una base filosófica existencialista. Hay que decir que los hermanos Coen no han tenido nada que ver con esta producción, pero el existencialismo de ésta resultaría coherente con al menos una parte de su filmografía: desde la también protagonizada por Billy Bob Thornton, El hombre que nunca estuvo allí (2001), hasta la reciente A propósito de Llewyn Davis (2013). Sin olvidar Un hombre serio (2009) cuya referencia al principio de la incertidumbre de Schrödinger y su gato vivo/muerto podría tener mucho que ver con el dilema del cocodrilo -y su niño comido/salvado- que da título a este episodio piloto.
Albert Camus (1913-1960) en El mito de Sísifo (1942), plantea el absurdo de la existencia humana. Afirma que la mayoría de nosotros vive sin tener conciencia de lo más importante: la muerte. Si no creemos en Dios, ni en la trascendencia del alma, la muerte es el final de todo. Un final seco, frío, desesperante. Esa consciencia debería cambiar completamente nuestra manera de entender el mundo, ya que todos nuestros actos sumados, sean cuales sean, siempre nos llevarán al mismo resultado: la nada. Eso cambia también el valor moral de nuestras acciones. Puedes ser fiel a tu pareja durante 10 años o un infiel sin escrúpulos, da lo mismo, al final morirás. No hay Cielo, ni hay Infierno. Esto querría decir que el asesinato no es mejor ni peor que donar dinero a una ONG. Obviamente, la mayoría de la gente no piensa así. Se guían por códigos morales prácticos y a menudo cambiantes. Básicamente, hacen lo que sea para pertenecer a un grupo: esos son los borregos. Pero hay otras personas que, coherentemente con esa conciencia de la muerte, actúan sin ataduras morales o éticas. Personas que entienden mejor su papel en el orden de las cosas porque saben que todo es... absurdo.

Fargo, la película, nos presenta a una mujer policía, Marge Gunderson (Frances McDormand), con una gran capacidad deductiva, que se mueve entre personajes pintorescos, intelectualmente limitados, pertenecientes a la llamada América profunda. Fargo, la serie, opera en el mismo sentido y divide a sus personajes en dos clases. Algunos parecen inteligentes, otros, no tanto. Lo que creo que diferencia la serie de la película es que Hawley apoya esa diferencia en un concepto similar a la conciencia del absurdo que propone Camus. En la serie, algunos personajes parecen haber "despertado" a la realidad de la existencia -los que han salido de la caverna, según la alegoría de Platón- mientras que otros -la mayoría- prefieren seguir contemplando sombras. Siguiendo esta división, los hombres y mujeres que viven en el universo deFargo son constantemente comparados con animales. Yo los dividiría en lobos y borregos. Por último, en este universo de silenciosos parajes nevados, no existe Dios, sino una incertidumbre moral.



