Desde hace algún tiempo para acá, estoy haciendo turnos de noche. Por motivos familiares es un turno que me permite atender a mi hija y realizar otras actividades que no tienen nada que ver con el ámbito de la farmacia.
Este turno, lejos de ser un turno parecido a trabajar de mañana o de tarde, el publico que acude a la farmacia de noche es un publico variopinto. Encuentras pacientes que vienen a las 3 a.m. te hacen un encargo y lo vienen a buscar el próximo día a la misma hora.
Pacientes que estresados por que han dado una dosis mal a su hijo y llaman en búsqueda de información.
Pacientes que intentan colarte la "necesidad de un antibiótico, analgésico o diurético" por solo nombrar algunos, con la esperanza de que la persona que trabaja el turno de noche sea menos restrictiva. Pacientes corriendo a buscar un envase para análisis de orina, etc.
Es un turno donde puede venir un paciente a buscar sus medicamentos prescritos en su receta electrónica y llevarse 10 o 12 medicamentos que son los que usa durante un mes de tratamiento, o una mujer a buscar una crema de cara contra las arrugas ( siendo una farmacia ce 24 horas donde se trabaja por turnos), es lógico pensar que con respecto al resto de los productos que no son medicamentos están a la disposición de los clientes/pacientes que vengan a la farmacia.
La realidad es que el farmacéutico de noches debe ser mas precavido, tiene que se mas cauto al dispensar algún producto. Trabaja casi sin red. No puede consultar a ningún compañero de la farmacia, no puedes consultar a la sección de dispensación del colegio de Farmacéuticos o llamar al medico para que te aclare su intención en el caso de una prescripción que se halle fuera de los cánones. La realidad es que un farmacéutico de noche tiene que tener experiencia, empatía, capacidad de decisión, y que ademas lo haces detrás de una ventanilla.