El Château d´Ancy le Franc, en plena Borgoña, es la pequeña joya del Renacimiento en Francia. El arquitecto, y tratadista de Arquitectura, Sebastiano Serlio ejecutó aquí su obra maestra: una perfecta construcción cuadrada que servirá de inspiración al Palacio del Louvre.
La bella planta del edificio se completa con la esplendida colección de pinturas murales manieristas de la Escuela de Fontainebleau. La próxima entrada se dedicará a la Sala de las Artes Liberales, y reservamos ésta para la obra más espectacular: La batalla de Farsalia.
La batalla librada en el 48 a.C. entre Cesar y Pompeyo que da inicio al Imperio llena las paredes de una de las cuatro galerías. Paolo Ucello había mostrado el modo de reflejar la dureza de una batalla y su perspectiva. Los pintores Niccolo dell’Abate, Ruggiero de Ruggieri y Nicolas de Hoey utilizaron los tonos ocres y todos los recursos expresivos para conseguir una obra singular.
El carro del triunfador Cesar aparece apoteósico entre dos ventanas al patio. A sus pies, como rendidos también, se muestran los instrumentos musicales y matemáticos: una esfera armilar, un compás, una escuadra y un rombicuboctaedro. Los poliedros están unidos al arte renacentista desde los tratados de Piero de la Francesca y los dibujos de Leonardo para la Divina Proporción.