Fear the walking dead

Hace ya un tiempo reseñé la primera temporada de The walking dead. Entonces decía que le echaría valor y la seguiría. Así fue, aunque no he ido reseñando cada temporada porque tampoco sabría muy bien qué decir. Lo único que queda claro es que, según pasa el tiempo, más difícil es mantener la humanidad y más obligado se hace sacar el valor de hacer cosas que nunca se habrían hecho en un mundo sin zombis. Los personajes van entrando y saliendo de la serie y sólo hay una constante: Rick. Junto a él, sólo quedan un par de supervivientes de la primera temporada. Muchos momentazos, muchas historias terribles, auténticos locos que dan más miedo que los caminantes... Vamos, enganchada que está una.

Pues en esas estábamos cuando se anunció este spin-off que relataría el inicio del desmoronamiento mundial. Al igual que la primera temporada de la serie madre, ésta sólo consta de seis capítulos.

Argumento

En un Los Angeles pre-apocalíptico, un joven adicto, Nick Clark, se despierta después de una dosis de heroína en una iglesia abandonada. Escucha un grito y se encuentra con que uno de sus colegas está muerto y otro está siendo devorado por su amiga Gloria, ya convertida en zombi. Mientras huye de la escena, Nick es atropellado y luego hospitalizado por contusiones. El médico le dice a su madre, Madison, y su novio, Travis Manawa, que las declaraciones de Nick sobre el incidente son alucinaciones inducidas por las drogas. Sin embargo, ambos llegan a creer parcialmente a Nick después de visitar la iglesia y ver enormes manchas de sangre.

Nick se escapa del hospital y se encuentra con su camello, Calvin, con la esperanza de saber si las drogas que vendía tenían algo especial y causaron las alucinaciones en la iglesia. Calvin lleva a Nick a la orilla del río, donde intenta matarle con el fin de evitar que le delate como un traficante. Nick se percata, luchan, Calvin recibe un disparo en el pecho y muere. Poco después llegan Madison y Travis, al que Nick llamó pidiendo ayuda. Sin embargo, cuando vuelven al sitio, el cadáver ya no está inmóvil y camina hacia ellos transformado. Nick les salva al embestirle con el camión de Travis. 
Cada vez tienen más claro que deberían huir al desierto y, para ello, deberán juntar a la familia de Madison: Nick y su hija adolescente, Alicia; y la familia de Travis: su ex-mujer, Liza, y su hijo Chris.

ReseñaSi hay una gran pega que ponerle a la serie es la forma en que se plantea el inicio del virus zombi. En la serie original, el mundo ya había colapsado y sólo se sabe que incluso la gente que muere sin ser mordido por un caminante, acaba volviendo como uno a menos que se le destroce el cerebro. Lo que se esperaba era una explicación que al final no nos dan. Sabemos que Gloria era una drogadicta y, por algún motivo, ella es la primera en convertirse ¿Eso significa que fue una extraña combinación de drogas el detonante? ¿Entonces por qué Calvin y todo el que muere a partir de ese momento se transforma? ¿Es Gloria la primera en transformarse tras morir (imagino) por una sobredosis justo en el momento en que el virus se "activa" en todo el mundo? En definitiva, vemos el inicio de todo pero nos quedamos con las ganas de una explicación... otra vez.

Es desesperante ver la serie, sabiendo lo que va a pasar, y comprobar que no dan una a la hora de contener el problema. La gestión desastrosa y el caos que no tarda en aparecer resulta descorazonador. Ver el mundo yéndose a la mierda, la incapacidad de control de la policía, la gente ciega e ignorante a lo que está pasando que estorba más que otra cosa a quienes intentan contener la amenaza... Quizás es lo mejor de la serie y, al mismo tiempo, lo más triste.

Habrá quienes la tachen de lenta, para mí tiene el ritmo perfecto para lo que se debe contar, que es el inicio de todo. Aún así, se produjo un salto demasiado brusco entre el comienzo y cuando ya está todo perdido: al aparecer los militares. Por cierto, que éstos en su mayoría sean más bien unos capullos desmitifica bastante y le quita mucho de ese patriotismo del que suelen abusar las historias que los incorporan.

En cuanto a personajes, Madison me parece la mejor con diferencia: observa lo que está pasando y se da cuenta que las cosas han cambiado para siempre. En cambio, Travis es un personaje al que le va a costar perder la humanidad necesaria para sobrevivir y puede llegar a ser muy interesante ver una evolución en él, un poco lo mismo que pasó con Rick, el tiempo dirá. Nick es también un personaje muy sólido y es un punto muy interesante el haberle concebido como drogadicto. En cambio, los adolescentes... ay, es que son TAN adolescentes... Me ha costado tragar con ellos. Mención especial para Tobias, otro adolescente que es una enciclopedia andante de catástrofes, sabe lo que va a pasar, paso por paso y, si los guionistas son inteligentes, lo recuperarán más adelante haciéndolo fijo porque es muy grande. Si el apocalipsis zombi empezase, os encantaría tener un Tobias cerca.

En definitiva, la serie no me ha dado lo que creía pero, aparte del chasco por la falta de respuestas sobre el ¿virus?, me ha gustado más o menos igual que la serie madre. También le ha pasado a esta temporada lo mismo que le ocurre a las de aquella: muy buen inicio, final que quita el aliento y una parte intermedia algo más lenta y floja para profundizar en los personajes. Con ganas de más.