¿Es posible que un mes pase antes tus ojos en un visto y no visto pero al mismo tiempo, sientas que esas 4 semanas, han sido las más intensas y eternas en meses? El tiempo puede pasar tan deprisa pero también dejarte tan extenuado que apenas tienes sensación de lo que vives, a veces... La vida vuela y se nos escapa sin darnos cuenta. El trabajo nos absorbe y los fines de semana, siempre saben a poco. El mes de febrero, igual que enero, ha venido cargado. Cargado de emociones, trabajo, tensiones, momentos muy muy intensos. Supongo que será por eso que se hace más extraña la velocidad con la que ahora me doy cuenta que han pasado estos días. Siento que a pesar de ser febrero el mes más corto del año, ha sido el más largo de todos los últimos meses y aún así, me detengo a visualizar qué he hecho en estas semanas... y me doy cuenta, que tampoco mucho. ¿Dónde queda entonces febrero y sus momentos?
Un mes fantasma... Aunque también hubieron realidades. Aquí las más bonitas y agradables.
1. Mañanas bonitas en casa 2. Las flores de los fines de semana 3. Las calles de durante la New York Fashion Week 4. La vuelta a casa y las cosas que quedaron tras el viaje, por ejemplo, el bonito ejemplar de Vogue US 5. Comidas con mamá en Travel & Cake 6. Paseos por la ciudad cuando se esconde el sol 7. Pastel para dos. Esos ricos carrot cakes de Cosmo Café 8. Días libres entre semana, cargados de buenos momentos y mucho relax 9. Reencuentros con antiguas y bonitas amistades. Desayuno - brunch en Muy Mío Plaza