Federico García Lorca tiene un extenso poemario para niños. Hoy recordamos una pequeña rima del poeta granadino más universal. El lenguaje figurado no hace esta rima especialmente fácil, pero precisamente eso, por el diálogo y las ensoñaciones que puede generar, es por lo que es especialmente buena para niños bilingües.
La tarde equivocadase vistió de fríoDetrás de los cristalesturbios, todos los niños,ven convertirse en pájarosuna árbol amarillo.La tarde está tendidaa lo largo del río.Y un rubor de manzanatiembla en los tejadillos.