Feliz a los 40. #cenasadivina y #thefreemeproject
Por Nosoysuperwoman
El viernes pasado fui a una cena de Silvia, de Cenas Adivina. La experta, en esta ocasión, fue Isabelle, de The Free Me Project.Como siempre, Silvia fue la mejor de las anfitrionas, la comida de Cookita un 10, e Isabelle, genial.Varias me habéis preguntado qué son las cenas y qué hay que hacer para ir, y os lo quiero contar. Más allá de una cena en la que hay una experta (son temáticas, de antemano y por su calendario puede ver las fechas y los temas, y apuntarte con muuuuucho tiempo porque escasean los sitios), para mí es una oportunidad de hacer algo que me apasiona: conocer a otras personas que, en muchos casos, tienen poco o nada que ver conmigo. O eso es lo que a priori puede parecer. Porque la realidad es que, tras varias horas de charla, siempre he encontrado puntos comunes.Me fascina escuchar los puntos de vista de otros sobre un tema, me parece algo francamente interesante y de lo que siempre saco partido. Porque, aunque yo no soy de etiquetas y suelo tener la mente muy abierta, creo que una de las mejores maneras de aprender es escuchar a otros, con otras vivencias, otras reacciones ante los mismo acontecimientos, otras experiencias, otras formaciones....Otras vidas. Siempre que voy, salgo con mis propias ideas más claras.Las cenas siempre comienzan con una breve presentación por parte de cada uno de los asistentes, y en mi caso mi presentación fue "hola, soy Paula, y acabo de pasar una crisis de los 40 de libro pero sin comprarme un deportivo, sin apuntarme al gimnasio y sin cambiar de pareja". Y me quedé tan ancha.La cena del viernes estaba centrada en el proyecto The Free Me Project, un proyecto de Isabelle que pretende ayudar a alcanzar la verdadera libertad femenina, sin tantos condicionantes como parece que existen. Y, concretamente en esta velada, la conversación estaba centrada en un aspecto fundamental del liderazgo femenino. La pregunta de partida era ¿ Sabes venderte? Y casi todas, como standard femeninos que somos, con humildad decíamos que no....
Todos atentos escuchando a Isabelle.
Foto de CenasAdivina
Yo tuve hasta silla personalizada
Foto de Cookita
Una de las dinámicas que propuso Isabelle fue que, durante 5 minutos (estábamos tan entretenidas que se convirtieron en 8) charlásemos con otra asistente a la cena que no conociésemos de antes. Antes de eso, habíamos escrito cada uno en un papel 2 ó 3 caracterísiticas de nuestro carácter. Al terminar ese ratito de intercambio, la otra persona decía qué le habías transmitido, y ahí empezó la juerga.En mi caso, la palabra que según mi interlocutora me definía era "feliz". Lo que transmití fue que soy una persona feliz, cosa que yo interpreto como "satisfecha". Y eso me hizo pensar. ..Efectivamente, estoy en un período de mi vida en el que puedo decir sinceramente que soy feliz. Estoy contenta con mi vida, tengo planes (que no terminan de concretarse), una familia que me quiere y a la que quiero. Estoy rodeada de personas que me aportan mucho, y cada día me interesa aprender más sobre todas las cosas. Creo que es un buen resumen, y pienso que el camino que he recorrido los últimos meses, el último año, ese camino que yo llamo "crisis de los 40" ha sido fructífero. Me he buscado, he tomado decisiones importantes, he eliminado cosas y personas que no me aportaban nada (nada bueno). Sin darme cuenta, internamente estaba haciendo mi propia lista de "Cosas imprescindibles" y "Cosas innecesarias". Y hoy por hoy puedo decir que estoy feliz, feliz e ilusionada con lo que viene y lo que me espera. Con una cierta dosis de incertidumbre que siempre aporta algo de marcha a la vida.Por primera vez en muchos años puedo decir que disfruto de verdad de lo que hago y de lo que tengo, aunque, para qué nos vamos a engañar..siempre queremos más. Incluida yo. Pero si me dicen que pida algo, sólo podría decir "Virgencita, que me quede como estoy"Así que sí, tengo 40, soy feliz, y me gusta. Y, sobre todo, espero que dure este sentimiento...me esforzaré todo lo posible para que así sea.