¡Feliz año 3014!

Es necesario que todos esos economistas que no supieron ver ni la burbuja inmobiliaria y se creyeron los datos contables de las cajas de ahorros nos ayuden a entender las magníficas cifras de la economía española, que hacen que el gobierno no pare de dar saltos de alegría, que los ciudadanos se malician que es más falsa que su programa electoral.
Podemos empezar por pedirles que nos expliquen qué pasa con la mayor y más sólida entidad bancaria española, cuyo presidente nos dice que todo va no bien, si no de putísima madre, lo cual puede ser cierto si mira sus cuentas. O no.
Porque la magnífica gestión empresarial supuso que en 2013 la entidad ganase como 4.500 millones de euros, y eso son muchos, pero que muchos euros. La letra pequeña es la que nos matiza esta maravilla de las maravillas empresarial y financiera. En realidad de esos euros en España ganó unos 300 milloncejos de euros, una pena porque la cifra ya no es tan bonita.
Y la cifra ya empieza a ser preocupante cuando nos cuentan que la citada entidad posee deuda soberana española por valor de 48.502 millones de euros. Soberana deuda, que está clasificada como BBB y no como AAA. Como las grandes magnitudes suelen ser tan enormes que no sirven para nada en realidad, podemos hacer un cálculo de lo soberano del pufo dividiendo el importe del papel comprado entre los euros ganados a ver en qué plazo se cubriría tal pufo.
Mira qué bonito, salen 166,666 años para tapar el agujero de los papeles comprados al estado para pagar sus gastos de funcionamiento. Eso es muy bueno para los españoles en general porque si desean esperar al ver liquidado el pufo del papel comprado van a vivir un huevo y parte del otro. Y estas pequeñas cosas son las que dan color a la vida, como saber que Bankia va muy bien, porque Caja Madrid recibió 24.000 millones de euros para ser "rescatada" y eso es cojonudo. Claro que también es cierto que gastó 24.000 millones de euros en comprar deuda pública al estado español. Como se dice por ahí, lo comido por lo servido.
Así que las entidades financieras españolas, incluyendo las rescatadas dicen que atesoran 110.000 millones de euros de papel emitido por el estado, esperamos que no hayan comprado también deuda emitida por comunidades autónomas, diputaciones provinciales y ayuntamientos y no se cuente como deuda soberana si no como soberana deuda y por lo tanto no contabilice. Porque entonces la suma de todos los pufos puede requerir por lo menos 500 años para poder ser liquidada con beneficios, no dejando ni un euro de los mismos durante cinco siglos.
Hace cinco siglos Colón se topó con las tierras de América, así que podemos hacernos una idea de lo que puede llover en medio milenio. Ya puestos, como el pufo sigue creciendo día a día es posible que no se amortice en el doble de tiempo, así que podemos concluir que para España este es un milenio perdido.